LOS ARGUMENTOS del Gobierno de emprender una política para la reactivación económica del país, teniendo como pilar fundamental al sector de la vivienda, no han cuajado.
El discurso de la ministra de Vivienda, Catalina Velasco, con el soporte que se tienen listos $ 10 billones para la construcción de vivienda y la ampliación de los subsidios, no ha convencido hasta ahora ni a los gremios y mucho menos a los sectores políticos.
Precisamente, en un debate de control político en el Congreso el jueves pasado, varios parlamentarios se lanzaron en ristre contra Velasco.
Todo esto a raíz del fuerte bajón que ha tenido el sector de la vivienda este año.
La ministra
Al respecto la ministra explicó las razones que llevaron al decrecimiento y cómo esperan desde el Gobierno nacional superar tal crisis.
“Fue una combinación de dos cosas, primero, un contexto macroeconómico que fue jalonado por la pandemia, que sucedió en el año 2020, y un descalabro final en ese momento. Eso es lo que nos tiene en esa situación de tener unas condiciones fiscales, de una deuda flash que hay que pagar en los años 2024 y 2025 y una situación de reforma tributaria que ha tenido sus dificultades”, dijo Velasco.
Y agregó, “en el contexto macroeconómico, tanto la inflación como la tasa de interés, que afectan la economía nacional, han influido en la situación y si a eso le sumamos que el comportamiento del gasto público no fue el más juicioso, pues tememos situación que tenemos y estamos resolviendo”.
La ministra Velasco aseguró que “para la reactivación económica, el sector de vivienda, agua potable, saneamiento es fundamental.
Baja ejecución
Al respecto, el senador de Cambio Radical David Luna, señaló al Ministerio de Vivienda de no usar sus recursos para la ejecución de sus proyectos en 2023 y aseguró que “estamos ante un gobierno solo de discursos”.
Sostuvo Luna que “debo hacer un severo llamado de atención a la ministra Catalina Velasco, cartera clave para superar la pobreza y reactivar la economía. reporta una ejecución en inversión de solo 5% a solo días de terminar el año”.
Sin embargo, en el debate el senador Miguel Uribe Turbay, del Centro Democrático presentó algunas cifras en las que revela la caída del sector de obras para viviendas y las dificultades para acceder a “Mi Casa Ya”, uno de los programas subsidiados por el Ejecutivo.
Lo primero que el senador Miguel Uribe señaló, a través de un comunicado, es que el sector de la construcción está pasando por uno de sus peores momentos en Colombia, ya que impulsa una buena cantidad de empleos y el Gobierno no realiza lo suficiente para salvarlo.
“Hoy del sector de la construcción dependen 1.500.000 empleos, y 72% de estos trabajadores corresponden a mano de obra no calificada que llega a las principales ciudades del país. Albañiles, plomeros, electricistas y otros trabajadores que muchas veces ven en la construcción la posibilidad de emplearse y de esta manera generar ingresos para sus familias. Este gobierno insiste en destruir lo que funciona. Esta es una política de Estado que desde hace 10 años diferentes administraciones han fortalecido, pero este gobierno llegó a destruirlo”, dijo.
Desconfianza
Según el congresista del Centro Democrático, la gestión del Ministerio de Vivienda “destruyó la confianza” en la construcción de casas y desató “la peor crisis del sector vivienda del siglo XXI. Las ventas de vivienda VIS cayeron un 50%, pasando de 150.173 en 2022, a 73.001 este año”.
Otro tema que Uribe Turbay consideró como muy grave es la “posible pérdida de 180.014 empleos directos e indirectos en 2024, y al drástico aumento en un 135% de los desistimientos a los subsidios de vivienda, por cuenta de los fuertes cambios que se hicieron a los requisitos para que los colombianos más necesitados pudieran cumplir con el sueño de tener casa propia”.
Los líos con “Mi Casa Ya”
El otro tema en el debate de control tiene que ver con el subsidio de vivienda “Mi Casa Ya”, en el cual Miguel Uribe afirmó que la ministra Catalina Velasco mintió respecto a que estaba concentrado regionalmente: “Desde 2015 a 2022 el programa había llegado a 326 municipios, el 75% de categorías 5 y 6, es decir, los más pequeños del país; y solo el 20% de los subsidios entregados han sido asignados en las cinco principales ciudades.
“Dice que las personas de más altos ingresos son las que reciben los subsidios. ¡Falso! El 80% de los que recibían los subsidios durante 2022 ganaban menos de dos salarios mínimos. Este argumento es una falsa motivación con el que Minvivienda cambia los requisitos de quienes hoy quieren obtener un subsidio de vivienda, pues con esta excusa ahora se les obliga a ser incluidos en el Sisbén, lo que ha sido un desastre en términos de focalización de la política de vivienda de este gobierno”, añadió.
El senador del Centro Democrático también se refirió a las cifras de 18.000 colados que el Ministerio de Vivienda indicó que recibieron el ingreso superior a lo debido: “Lo que no dice la ministra es que esos supuestos colados son agrupados de esta manera bajo los criterios de la nueva administración”.
Un punto a resaltar es que “no es cierto que se esté subsidiando el 100% de todas las viviendas que se construyen, como lo ha dicho la ministra públicamente. Solo el 53% de las viviendas entregadas entre 2018 y 2022 recibieron subsidios de Mi Casa Ya”.
Camacol
Representante del sector constructor, Camacol, que presentó la caída más importante, resaltó que estos resultados son consecuentes con la dinámica de los principales indicadores del sector. De acuerdo con la información de Coordenada Urbana, en lo corrido del 2023 se dejaron de vender 97.000 viviendas nuevas en Colombia, de las cuales 77.000 fueron viviendas de interés social, VIS. Entre enero y octubre del 2023, las ventas de vivienda cayeron 45,7%, afectando los inicios de obra que se contrajeron a una tasa de 27%, incidiendo en el resultado más reciente del PIB de edificaciones.
Sin embargo, la realidad es que el subsector que presentó mayor caída en este rubro fue el de construcción de carreteras y vías de ferrocarril, que decreció 15%, seguido de edificaciones y obras con -7,1% y edificaciones residenciales y no residenciales con 5%.
Camacol coincidió en que las cifras hacen evidente la necesidad de implementar una estrategia contracíclica efectiva para materializar los anuncios que ha hecho el Gobierno en lo corrido del 2023.
Convocar al sector privado
Fenalco, por su parte, dijo que es necesario que el Gobierno nacional convoque al sector privado para construir un plan de choque que mitigue una posible recesión económica.
El desplome en el caso de este rubro es parejo; el comercio retrocedió 2,9%, el transporte 3,9% y el sector de alojamiento y servicios de comida 4,5%.
“Es urgente aunar esfuerzos para que el país no caiga en una situación económica insostenible, toda vez que los tres sectores con los peores resultados fueron la industria, la construcción y el comercio, que son precisamente los grandes generadores de empleo y grandes aportantes al PIB”, dijo Jaime Alberto Cabal, presidente del gremio.
Fenalco también aseguró que hay un estancamiento en el consumo de los hogares que solo creció 0,4% como consecuencia del impacto de la reforma tributaria.