SI EN los próximos meses no hay un plan para la generación de empleo, la recuperación de la economía va a ser lenta. Así lo estiman investigadores del BBVA, al dar a conocer el informe sobre la ‘Situación Colombia’, que actualiza las proyecciones y analiza el contexto internacional y nacional.
Ante la situación actual con poco empleo y problemas de coyuntura con los intereses e inflación, dicen que para este año el crecimiento del PIB se ubicará en 1,5% este año y 2,8% en 2025.
Mauricio Hernández, economista de BBVA Research, dice que “hay indicadores económicos que señalan que la recuperación será lenta y tardará en consolidarse. Los factores determinantes de este comportamiento serán: la recuperación del ahorro de los hogares; las mejores condiciones de endeudamiento de los hogares; la reducción de la inflación; las menores tasas de interés; y, actuando en contra de las anteriores, la moderación del empleo”.
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Lo que se está viendo es que el ahorro de los hogares viene aumentando gradualmente y apoyará las decisiones futuras de compra, especialmente de bienes durables y vivienda, este último un sector que está pasando por un momento difícil.
Efecto empleo
Lo que se vio el año pasado es que los hogares regresaron al equilibrio financiero, lo que les dará espacio para asumir nuevas deudas cuando las condiciones les sean favorables. No obstante, el comportamiento menos positivo del mercado laboral pondrá algún freno a la recuperación, haciéndola gradual, de menos a más.
“En el segundo semestre de este año se acelerará la recuperación, cuando el mayor gasto de los hogares, especialmente en bienes y no tanto en servicios, se acompañe de más decisiones de inversión por parte de los empresarios. Además, la industria manufacturera y el comercio de bienes se unirán a esta tendencia de recuperación. En total, la economía transitará a dos velocidades durante 2024: una más lenta en el primer semestre y una aceleración al cierre del año que se consolidará con el mayor crecimiento que se espera para 2025”, explicó Hernández.
La inflación
En 2023, la inflación de alimentos permitió los mayores ajustes, pero la cifra sin alimentos no cedió a razón de fuertes presiones al alza en servicios, energía y combustibles. Sin embargo, “las noticias más positivas esperadas en materia de inflación significarán unas mejores condiciones financieras para los hogares desde este año. De hecho, la inflación total ya se redujo en 5 puntos porcentuales frente a su máximo (13,3%) del año pasado y esperamos en BBVA que el IPC mantenga una senda decreciente durante los próximos años, cerrando 2024 en 5,4% y 2025 en 3,8%”, explicó Alejandro Reyes, economista principal de BBVA Research.
Con este comportamiento, el estudio apunta a que el Banco de la República acelere las rebajas de tasas, en parte gracias al descenso de la inflación y el débil comportamiento de la economía. La proyección es que la tasa de intervención del Emisor cerrará 2024 en 7,0%.
Otra de las variables que llama la atención y que determinará el crecimiento es el desempleo. En este punto, Hernández asegura que “la creación de empleo se moderará en 2024 y mejorará marginalmente en 2025, en línea con el comportamiento de la actividad. Las expectativas acerca de la actividad hacen prever un empleo jalonado por el sector de servicios relacionados con los servicios sociales. Desde el segundo semestre de 2024, el empleo en el comercio se acelerará y hacia finales de año el de la industria”.
Para 2025, el empleo acelerará su crecimiento, en línea con la aceleración de la actividad, jalonado por el sector de la construcción con la consolidación de las edificaciones residenciales y no residenciales, intensivas en mano de obra, la industria y los servicios privados.