Se espera mayor volatilidad del dólar por incertidumbre geoeconómica | El Nuevo Siglo
LAS DECISIONES externas están afectando los mercados y el comportamiento del dólar. /ENS - archivo
Lunes, 3 de Febrero de 2025
Redacción Economía

MIENTRAS EN el primer mes del año, la cotización del dólar se mantuvo ligeramente a la baja, mitigando un poco las presiones alcistas con las que terminó el 2024 respecto al peso colombiano. Para el cierre del primer mes de año, tuvo una cotización por debajo de los $4.200.

Sin embargo, el contexto geopolítico ha marcado el comportamiento del dólar en estos primeros días de febrero, sobre todo por las políticas comerciales del presidente estadounidense Donald Trump.

Para los analistas de Credicorp Capital, se espera que la divisa de referencia en el mercado global fluctúe entre los $3.900 y los $4.700, teniendo una cotización promediada de $4.300 durante este año.

“La llegada de Trump trajo consigo la disminución de las presiones alcistas en el dólar que habíamos observado post elecciones presidenciales, debido a que, en un principio los mercados asumieron como inflacionistas las políticas comerciales, migratorias y empresariales que había anunciado Trump, en donde los anuncios de imponer aranceles generó temor en los mercados por las afectaciones económicas, principalmente inflacionarias”, sostuvo Alejandro Guerrero, asociado senior de divisas de Credicorp Capital.

Repunte

Por su parte, los investigadores de Corficolombiana, liderados por César Pabón Camacho, señalaron que el tipo de cambio subió levemente la semana pasada y cerró el viernes en $4.211. El comportamiento de la moneda estuvo alineado con el fortalecimiento del dólar a nivel global, medido a través de un aumento del 0,9% del índice en el marco de la decisión de la FED que mostró una postura monetaria más cauta al pausar su ciclo de recortes de tasas de interés.

A su vez, en Colombia, el repunte de la tasa de cambio al cierre de la semana pasada estuvo enmarcado en la expectativa por la última decisión de política monetaria de la Junta Directiva actual del Banco de la República, en la que decidieron por mayoría mantener la tasa de política monetaria sin cambios en 9,5%.

Otro elemento que incidirá en la cotización del dólar es el rumbo de los precios del petróleo en 2025 que serían menores, debido a una demanda más débil de China y a una mayor oferta global de crudo. En este contexto, precios del petróleo más bajos que los registrados entre 2022 y 2024 impactarían negativamente los términos de intercambio de Colombia, lo que se traduciría en una menor entrada de divisas por exportaciones petroleras y una caída en la inversión extranjera directa (IED) en el sector, que representa el 24% de la IED del país y está estrechamente vinculada al precio del petróleo.

Inversión extranjera

En efecto, los flujos de IED hacia los sectores de minería y petróleo cayeron un 49,8% interanual en el primer semestre del 2024, contribuyendo con el 58% de la caída de la IED total. Sin embargo, es importante señalar que este retroceso en minería y petróleo se compara con un segundo semestre de 2023 excepcionalmente alto, cuando la IED aumentó un 84,5% anual debido al impacto de la reforma tributaria de 2022.

Esta reforma, que incrementó la carga fiscal en sectores como el minero-energético, impulsó un flujo de inversión destinado a cubrir las obligaciones impositivas. Finalmente, la incertidumbre sobre la sostenibilidad de las finanzas públicas seguirá presente en 2025.

Con el monto del Presupuesto General de la Nación actual, el gobierno necesitará realizar nuevamente un ajuste al gasto para cumplir con la regla fiscal. Además, la propuesta de reforma al Sistema General de Participaciones añade presiones estructurales inesperadas al presupuesto, lo que incrementa la percepción de riesgo entre los inversionistas internacionales.

De hecho, la prima de riesgo país medida a través de los CDS a 5 años de Colombia, viene descontando una rebaja en la calificación crediticia, al punto que en lo corrido del año se ubicó, en promedio, 36 puntos por encima de la de Brasil, cuya calificación crediticia es dos niveles inferiores a la de Colombia.

Pagos de impuestos

Señalan los expertos de Corficolombiana, que “esperamos que el dólar en Colombia experimente un ligero alivio durante los primeros meses de 2025, debido al mayor flujo estacional de divisas por el pago de impuestos de grandes empresas y la menor volatilidad postelectoral en los activos de la región”.

Así, el tipo de cambio se situaría en promedio en $4.344 durante el primer semestre, aunque con una volatilidad mayor a la que se registró en la primera parte de 2024. En el segundo semestre se registraría una depreciación de 0,5% que llevaría el tipo de cambio a un promedio de $4.367. Esto supone que el dólar se mantendría en un rango entre $4.150 y $4.650 en 2025, registrando en promedio una depreciación de 6,0% frente a 2024.

“Lo que sí podemos anticipar es que la volatilidad del tipo de cambio será elevada en 2025”, sostienen los investigadores.

comportamiento  dólar

Altibajos

Por otro lado, analistas como Juan David Ballen, de Casa de Bolsa, asegura que, para el segundo trimestre de este año, y muy por el contrario de sus inicios, el precio del dólar estaría entre $4.100 y $5.000, como resultado del deterioro fiscal.

De igual manera, Ballen explica que otro factor importante en el alza del dólar y la depreciación del peso colombiano para este periodo del 2025 son las políticas proteccionistas que Estados Unidos implemente con el mandato de Trump, afectando así las exportaciones.

Así mismo, resalta que la disminución de la demanda del crudo en países como China y el aumento de este a nivel mundial, representan un gran descenso en su precio global.

Aun así, los analistas esperan que el aumento gradual de las importaciones y exportaciones pueda darse en un contexto de reactivación lenta por parte del consumo e inversión.

De igual manera, se proyecta que el deterioro de la cotización del petróleo y los volúmenes de producción sean compensados por la tasa de cambio. “En el mediano plazo creemos que podría haber un rango de corrección, esperando a que estos choques se diluyan”, confirma David Cubides.

El Grupo de Investigaciones Económicas de Bancolombia da señales de “alivio” durante el año. “La evolución de los desembolsos de consumo, hipotecarios y comerciales, durante los últimos meses refleja una reconfiguración desde la demanda debido a las menores tasas de interés y un sistema financiero puesto a apoyar la reactivación económica”, argumentan desde el banco.

Por último, otros especialistas prevén que pueda bajar la TRM con el restablecimiento de la democracia en Venezuela y el aumento de remeses que ingresen al país.

Impacto por aranceles

A nivel geopolítico, las declaraciones del presidente Donald Trump agregaron presión al mercado de divisas. Sus amenazas de imponer aranceles del 100% a los países miembros de los Brics si intentan reducir la influencia del dólar en el comercio internacional generó preocupación entre los inversionistas. Esta advertencia no solo refuerza el estatus del dólar como principal moneda de reserva, también incrementa la volatilidad en otras divisas emergentes.

En este contexto, el peso colombiano experimentó una corrección en su tendencia y rompió una racha de cuatro semanas consecutivas de apreciación. La mayor aversión al riesgo en los mercados emergentes afectó al peso, que se desvalorizó en línea con otros mercados de la región. No obstante, el impacto del fortalecimiento del dólar sobre el peso colombiano podría verse moderado por la reciente decisión del Banco de la República, cuya política monetaria sigue desempeñando un papel clave en la estabilidad del tipo de cambio.

Ante este panorama, las proyecciones para el peso colombiano sugieren que la moneda podría mantenerse en niveles cercanos a los $4.300 durante la primera parte de 2025. La evolución de la tasa de cambio dependerá de cómo se desarrolle el contexto internacional, en particular las decisiones de la FED, así como de la capacidad del país para generar confianza en los mercados y atraer inversión en medio de un escenario desafiante.