Más que una reforma tributaria que grave más a los colombianos, el país necesita una recomposición de los impuestos, señalaron varios expertos en el marco del evento “Reconfigurando el Futuro de Colombia”, organizado por la firma consultora y auditora KPMG, donde se reunieron representantes del sector público, privado y la academia.
Durante la charla, el viceministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Alberto Londoño, proyectó un crecimiento de 6% para el 2021.
Al respecto, Camilo Bueno, socio líder de estrategia, clientes y mercados de KPMG en Colombia, informó que la deuda externa, se calcula, será de 70% del PIB para finales del 2020. Eso tiene que llevar al país a unirse para entender la magnitud de la deuda que se va a asumir en el exterior, además, para comprender las nuevas dinámicas que propone la crisis en temas económicos.
Durante la intervención del viceministro Londoño, este se refirió a la existencia de una “ancla fiscal muy importante”, pero los mercados nacionales e internacionales están retomando la confianza, lo cual lleva a que las tasas de interés retomen a las cifras normales. Otro parte positivo, es que hay una “capacidad de gasto excepcional” para atender la emergencia.
La banca
Enfatizando en ese papel de la banca, Guillermo Jaramillo, socio líder de Consultoría e Innovación KPMG Colombia, expresó que hay dos actividades dentro de la reconfiguración financiera del país que son claves: la primera es, precisamente, la bancarización y la otra, la interoperabilidad.
“Yo le pediría al presidente Iván Duque, que enfile todas sus baterías en motivar la bancarización digital. En los últimos cuatro meses vimos una superación de los tres millones de nuevos suscriptores en la banca digital; ya sea con bancos tradicionales o fintech. De igual manera, se debe hacer un trabajo fuerte en interoperabilidad, porque permite que el sector financiero y de seguros entienda, en situaciones como la que vivimos, a quiénes hay que entregar ayudas y también a conocer a los usuarios”, sostuvo.
Asimismo, el Viceministro de Hacienda también explicó que se debe entender que en el mediano plazo habrá que “pensar en generar mayores ingresos a la Nación, además de alcanzar una mayor eficiencia en el gasto”. Otros expertos abordaron la posibilidad de una nueva reforma tributaria, asegurando que será necesaria, pero haciendo varias precisiones.
Luis Fernando Mejía, presidente ejecutivo de Fedesarrollo, dijo que “hemos visto un aumento en el impuesto de renta para las empresas y el de las personas sigue estando muy por debajo; la composición es totalmente distinta, la gran mayoría de países lo que hacen es gravar, especialmente, a las personas que son dueñas de las empresas y no tanto a las compañías, hay que cambiar ese balance de la composición tributaria”.
Exenciones
Por su parte Marcela Eslava, decana de economía de la Universidad de los Andes, dijo que “una reforma tributaria es inevitable. Por una parte, porque ya sabíamos que para 2021 íbamos a estar desfinanciados y que era necesario saber de dónde iban a salir esos recursos, pero además porque los colombianos no deberíamos estar contentos con un sistema tributario regresivo”.
Sostuvo la Decana que “nos hemos equivocado en el intento, en una parte, por generar exenciones para sectores específicos -empresas- y eso se entiende en el ámbito internacional como una movida detrimental de la productividad agregada, en esencia, porque distorsiona todos los incentivos y lleva a la actividad hacia sectores que son más rentables porque tienen menos impuestos, pero no necesariamente son más rentables porque son más prometedores en términos de crecimiento a futuro, es decir, los que más productividad van a generar”.
A su vez, Ángela Hurtado, presidenta de JP Morgan Colombia, indicó que “somos un país que recauda muy poco sobre el porcentaje del PIB. Tenemos unos impuestos malos como el 4x1000 que finalmente lo único que hacen es incentivar el uso del efectivo y la informalidad, tenemos exenciones que le valen al país más de $80 billones y muchos de esos benefician a algunos sectores privados, además, somos uno de los países menos competitivos desde el punto de vista privado y más complicados tributariamente. Tenemos que llegar a un acuerdo y, desde el sector privado, llegar al Gobierno con propuestas donde todos pongamos”.
Por su parte Bruce Mac Master, presidente de la ANDI, dijo que “no hay la menor duda que se requerirá de una reforma tributaria. Colombia, haga lo que haga, debe crear las condiciones correctas para que exista más y mejor inversión. Solamente así recuperaremos los índices que se han caído”.