Al aumento del desempleo en enero con respecto a diciembre y de la inflación en febrero frente al primer mes de 2025, se suma que sectores claves de la economía, como el de consumidores, comercio, industria e inversionistas están evidenciando una creciente desconfianza y pesimismo.

Ayer, por ejemplo, se advirtió de la drástica caída del Índice de Confianza del Consumidor (ICC), de pública Fedesarrollo. Retrocedió un 12% en el segundo mes del año. Para el centro de estudios económicos este es un dato preocupante por cuanto refleja las expectativas y percepción de los hogares acerca de la situación económica actual.

Así las cosas, alerta que entre los consumidores la disposición a comprar bienes durables disminuyó en 6,4%. Además, por nivel socioeconómico, se registró una disminución en la confianza de 4,9 puntos porcentuales en el estrato medio y de 17,7 en el estrato bajo. Cuando se preguntó cuál era la expectativa para comprar vivienda, aquí también hubo una disminución de cuatro puntos porcentuales.

Lo más preocupante es que el pesimismo no se refleja solo en el ICC. Días atrás Fedesarrollo también presentó una encuesta alrededor del Índice de Confianza Comercial, que apenas aumentó un punto porcentual. Este dato preocupa porque al cierre de 2024 este fue uno de los pocos sectores que mostró algún tipo de repunte, según el reporte del DANE sobre el Producto Interno Bruto, que apenas creció un bajo 1,7% en general.

A esto se suma, el dato del Banco de la República respecto a la inversión extranjera directa en 2024. Aunque el país recibió un total de 14.234 millones de dólares, se constató una disminución de 15,1%. Si bien se esperaba un retroceso, sobre todo por el menor dinamismo del sector minero-energético debido a la polémica política gubernamental en la materia, la caída fue más pronunciada de lo previsto.

Y como si todo lo anterior fuera poco, hay que traer a colación el Índice de Incertidumbre de la Política Económica en Colombia (IPEC), en el que 56,7% de las noticias marcan un panorama gris para el sector productivo, según los encuestados.

Lamentablemente, el clima de negocios, así como la oferta y demanda de productos siguen impactados por el pesimismo y la desconfianza, sin que se vea una luz al final del túnel.