¿Modernismo y anacronismo? | El Nuevo Siglo
Miércoles, 13 de Noviembre de 2013

*Faltan preguntas en la encuesta

*La alternación democrática

 

Algunos analistas de mentalidad arcaica consideran que los partidos políticos en la lucha por la alternación en democracia deben ser mayoritarios para llegar al poder, lo que a primera vista parece elemental, siendo que en realidad existen otros parámetros que influyen en la suma de voluntades que en una elección definen quien será el ganador. Por eso no siempre las encuestas aciertan cuando dan los datos de los porcentajes con los que cuentan los candidatos entre sus posibles simpatizantes o de los que tienen imagen de estos en contra que es un factor importante pero no definitivo y puede ser cambiante. En Colombia en el partidor de las aspiraciones presidenciales partidistas figuran en la reciente encuesta Gallup, cuatro personajes por distintas agrupaciones políticas nuevas que serían Cambio Radical, la U, el Puro Centro Democrático, los Verdes y el Polo, como aspirante dentro del Partido Conservador se menciona Marta Lucía Ramírez, y el Partido Liberal no marca puesto que no tiene por ahora candidato, así en los corrillos políticos se especule que el expresidente César Gaviria se lanzaría al ruedo en caso de que el presidente Santos desistiera de la reelección y de manera inevitable el candidato fuese Germán Vargas Lleras. Si se suman los porcentajes del Polo y de los Verdes tendrían en este momento un 17% por encima de Óscar Iván Zuluaga y a diez puntos del presidente Juan Manuel Santos. Si se suman los votos de Óscar Iván Zuluaga y Marta Lucía Ramírez no consiguen alcanzar al Presidente.   

Lo anterior muestra a las claras que en un sistema presidencialista como el colombiano la lucha por el poder la definen fuerzas nuevas, incluso en formación. Situación que en algunas ocasiones se repite en la contienda electoral por las alcaldías, tal es el caso del alcalde Gustavo Petro, que alcanzó en minoría con un partido nuevo el Gobierno local. Este panorama de agrupaciones políticas recientes no significa, necesariamente, que se esté modernizando la política nacional. Si miramos bien todos los candidatos mencionados así puedan estar en un movimiento político nuevo, representan corrientes políticas antiguas y algunas anacrónicas, tal el caso del socialismo decimonónico. Y dentro de esas mismas corrientes políticas mencionadas figuran elementos cuya formación es peculiar a lo liberal y lo conservador, con algunas coincidencias en lo económico con el neoliberalismo. La encuesta en mención no pregunta qué piensan los eventuales electores de los programas -si acaso los tienen para gobernar-. Ese sería un punto fundamental para conocer el verdadero criterio político de los colombianos, que puede ser distinto o tener matices diferentes al de las simpatías o antipatías por los candidatos. El hecho de que los partidos jueguen sin un verdadero compromiso político para llevar a cabo un programa en el Gobierno prueba que el personalismo es más fuerte que las ideas para llegar al poder. Quizá por lo mismo el conservatismo que pone más de dos millones de votos para las elecciones al Congreso, no marca casi en las presidenciales, en tanto existe un divorcio entre los directorios, los congresistas y la militancia. Por cuenta de esa fatal disensión un partido político que podría definir las elecciones presidenciales se atomiza en sus preferencias por otras opciones presidenciales, sin percatarse de que de haber jugado mejor habría podido poner Presidente propio o al estar unido monolíticamente definir quién sería nuestro próximo gobernante ya sea Juan Manuel Santos u otro.  

Es interesante que en la reciente encuesta el 30.6% de los participantes declaren que votarían en blanco. Ese margen tan alto demuestra un descontento, indiferencia o creciente desconfianza de la bondad de los mecanismos políticos y de la misma democracia para resolver los problemas, al tiempo que trabajar ese segmento de la población podría variar sustancialmente el panorama electoral En segundo lugar capitanea las encuestas sin ser candidato Germán Vargas Lleras, le sigue el presidente Juan Manuel Santos que cuenta con el apoyo de Vargas, para llegar al poder lo que fortalecería las posibilidades de una reelección. A un poco más de 12 puntos del gobernante se encuentra Óscar Iván Zuluaga por cuenta de un partido que sigue buscando firmas para oficializar su existencia, seguido a corta distancia por Antonio Navarro, que gracias a la amnistía que disfrutan los milicianos del M-19, se incorporó desde el primer momento de forma inequívoca en la convivencia y la lucha democrática partidista de izquierda, que ahora se despliega al sector de los Verdes. Más atrás está Marta Lucía Ramírez con un 7.2% y Clara López Obregón con el 5.0% y un 3.2% que no responde.