Un informe realizado por Co-Work -referente del sector del coworking en el país y el máximo jugador de esta industria en Medellín- proyecta que este mercado crecerá en el 2022 en la región tres veces más que en años anteriores.
Esta es una de las razones por las cuales la multinacional activó dos nuevas sedes, una en el Edificio Campestre 1643, sobre la Av. El Poblado, y otra en Astorga, a pocos metros del Parque del Poblado, Provenza y el Metro. Para ello contó con una inversión de un poco más de $7.000 millones. Con este capital se adecuaron 4.888 metros cuadrados (m2) de oficinas, que impactarán a unas 800 personas en la capital de Antioquia.
En el caso de Campestre, este edificio tiene 1.620 m2 distribuidos en 321 puestos, entre oficinas privadas (casi el 70%) y puestos compartidos. “Contamos con cuatro salas de juntas, auditorio y locutorios. Tiene capacidad de albergar hasta a 321 coworkers”, comentó Sebastián O'Ryan, cofundador y CEO de Co-Work.
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Astorga, por su parte, se ubica a pocas cuadras de la Av. El Poblado y de la Calle 10, ofreciendo múltiples opciones de acceso al transporte público. Se construyó considerando que del piso 5 en adelante se destinaría para clientes que necesitan espacios únicos y exclusivos diseñados a medida de sus necesidades. Se trata de una propuesta para impactar un lugar comercial y muy privilegiado en ubicación.
“Esta sede cuenta con 3.268 m2. En los primeros cuatro pisos contamos con 232 puestos de trabajo, distribuidos en oficinas privadas y espacios compartidos. Tiene capacidad de albergar hasta a 232 personas bajo modelo coworking y más de 220 en el modelo a medida”, agregó O'Ryan.
Con la activación de esta renovada infraestructura, la multinacional suma en inversión más de US$3 millones en Medellín y US$2 millones en Bogotá, con lo cual garantiza un aporte importante en el crecimiento económico nacional. Próximamente abrirá tres nuevas sedes: dos en la capital del país y una en Barranquilla.