James Rodríguez debutó el sábado con su nuevo club, el León de México. Entró en el segundo tiempo cuando el equipo perdía, le hicieron un penal y al final ganaron 2-1 ante el Atlas. / Foto @clubleonfc
Domingo, 19 de Enero de 2025
No han sido buenos los últimos años de la carrera del 10 de la selección Colombia, James Rodríguez. Tras su paso por el Real Madrid y el no menos estelar Bayern Múnich la década pasada, el cucuteño ha deambulado por distintas ligas sin mayor éxito.
Llegó al Everton inglés en septiembre de 2020 y ya un año después aterrizaba en el Al Rayyan de Catar. Allí estuvo varios meses y a finales de 2022 fue anunciado como gran refuerzo por el Olympiacos de Grecia. Tras pocos meses rescindió una vez más otro contrato y para julio de 2023 volvía al fútbol suramericano, esta vez al São Paulo brasileño.
En todos estos clubes tuvo un rendimiento irregular y marcado por lesiones recurrentes. Se pensó que todo cambiaría en agosto del año pasado con su regreso a la liga española, esta vez al Rayo Vallecano, más aún porque venía de ser escogido como el Mejor Jugador de la Copa América que tuvo lugar en Estados Unidos y en donde la selección Colombia fue subcampeona.
Lamentablemente, en el club madrileño no la pasó bien porque el técnico, en una postura inexplicable, prácticamente lo mantuvo en el banco, alegando que no había pedido su fichaje. Al final, al 10 colombiano no le quedó más opción que llegar a un acuerdo para salir del club a comienzos de 2025.
Pese a todo ello, James no demoró en conseguir equipo. Acaba de firmar con el León de México, que jugará este año el Mundial de Clubes. Su fichaje retumbó en el fútbol manito, a tal punto que hubo estadio lleno para el partido de su debut, el sábado pasado, cuando apenas si jugó algunos minutos, pero le cometieron un penal y su equipo, que empezó perdiendo, ganó finalmente. No se sabe cómo le irá en el resto de la temporada, pero es innegable que el 10 colombiano marca la diferencia.