EL NUEVO SIGLO: ¿Considera que Colombia debe ser observador en las próximas elecciones presidenciales de Venezuela?
PAOLA HOLGUÍN: Creo que el papel que jugaría Colombia en las elecciones de Venezuela es similar al que jugó en las elecciones de Rusia. Es que por una afinidad ideológica que raya en complicidad criminal se termina validando un proceso totalmente ilegal.
Dudo que el papel de Colombia en ese proceso sea imparcial y pueda dar garantías al pueblo venezolano.
ENS: ¿No contribuiría esta observación a legitimar unos comicios que están claramente ajenos al trato democrático?
PH: Así es. Termina Colombia legitimando un proceso donde no va haber una elección, sino una farsa de votación que le permite a los venezolanos solamente votar por Maduro o por los candidatos de Maduro, porque la candidata única electa por la oposición venezolana en octubre del año pasado, finalmente no la dejaron inscribir y la inhabilitaron.
Se trata de María Corina Machado y después Corina Yoris, que era la otra candidata de la oposición, a quien tampoco le permitieron que participara en los comicios.
Reglas democráticas
ENS: ¿Cómo entender que el gobierno Petro hace una semana cuestionaba la exclusión de María Corina Machado como candidata y ahora está contemplando la posibilidad de participar como observador de los comicios en Venezuela?
PH: En su momento cuando hizo las declaraciones Gustavo Petro yo afirmé que eran unas declaraciones tardías y babosas, pues se veía venir el cambio de postura de este Gobierno frente al tema de Venezuela.
La tradición de la relación entre Petro y Maduro, y la complicidad que ha existió entre ambos, hacía evidente que no iba a durar mucho esa postura supuestamente democrática del presidente Petro.
ENS: ¿Considera que hay alguna posibilidad de que la dictadura flexibilice su veto a la oposición durante las próximas elecciones?
PH: Creo que es muy difícil porque lo que hemos visto es que el régimen venezolano se ha burlado de la comunidad internacional. Incumplió el Acuerdo de Barbados después de que Estados Unidos le entregó a Alex Saab y levantó las sanciones.
El gobierno de Maduro incumplió los compromisos que tenía; por el contrario, hemos visto cómo ha arreciado la persecución contra el equipo de María Corina Machado y contra los opositores, no solo dentro, sino fuera de las fronteras venezolanas.
Lo que sucede con el exmilitar en Chile es muy grave y lo que han denunciado en Colombia medios de comunicación sobre presencia del Sebin que, aliada con el Eln, están en esa campaña de persecución y represión contra los opositores venezolanos en nuestro territorio, es sumamente grave.
El apretón de manos
ENS: ¿Qué pasaría si el régimen llegara a capturar a María Corina Machado?
PH: Eso es muy grave. Es otra muestra a la flagrante violación a los derechos de María Corina Machado. En este momento sería muy importante que la Corte Penal Internacional ponga el acelerador a los procesos y a las investigaciones que está siguiendo contra el régimen de Maduro por las claras y sistemáticas violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional.
Creo que es hora de una postura mucho más fuerte y real por parte de la comunidad internacional. Además, creo que, si se mantiene este proceso de farsa, la comunidad internacional tiene que rechazar por ilegítimo el resultado, y no se podría permitir que siga avanzando como lo ha hecho hasta ahora el régimen de Venezuela en la captura ilegal de los opositores.
ENS: Se ha criticado mucho la visita de Petro a Maduro en Venezuela y muchos dicen que un Gobierno democrático no puede estrechar la mano de un dictador. ¿Usted qué opina?
PH: Siempre he dicho que el gran problema del Gobierno colombiano hoy es que las relaciones internacionales se están manejando con un criterio de afinidad ideológica que raya en complicidad criminal, y no bajo los principios y parámetros que Colombia históricamente ha tenido en el relacionamiento internacional.
En Colombia quienes somos defensores de la democracia, de la institucionalidad y los derechos humanos no podemos estar de acuerdo con esas permanentes visitas y esos esfuerzos que hace Gustavo Petro para tratar de legitimar a un régimen que está vinculado al narcotráfico y al terrorismo transnacional, un régimen que está siendo investigado por la Corte Penal Internacional por violación a los derechos humanos y al derecho internacional, un régimen que ha permitido la presencia en su territorio de estructuras criminales y terroristas que no solo atacan el pueblo venezolano, sino que también han afectado al pueblo colombiano.