Se realizó en el Congreso de Estados Unidos una audiencia en el Comité de Relaciones Exteriores sobre Venezuela. Al final de la misma, algunos congresistas manifestaron sus reservas por el acercamiento de los gobiernos de Gustavo Petro y Nicolás Maduro, así como el pedido al régimen para que el vecino país sea garante en las conversaciones que están cerca de comenzar con el Eln.

El presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, el demócrata Bob Menéndez, dijo que “la realidad es que es desafortunado que el presidente Petro le esté dando un abrazo a eso que actualmente viola los derechos humanos. No creo que él quiere para Colombia lo que el pueblo de Venezuela está sufriendo”.

En tanto que el senador republicano Marco Rubio consideró que “lo que está garantizando Maduro en este momento es darle refugio al Eln para hacer actualmente actos de terrorismo contra Colombia. Es lamentable, creo que va a lastimar la relación y la cooperación entre ambos países. Pero si él hace decisiones que van en contra de nuestros intereses, tendremos que actuar de manera de proteger a Estados Unidos”.

Reclamo

Por su parte Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, mencionó sobre el pedido que hizo Petro a Maduro para que  Venezuela sea garante en las conversaciones con el Eln, que “uno tiene que pensar quién va a ser los amigos del Eln, con su historia de asesinatos, de narcotráfico, de abuso de inocentes. No tienen amigos de buena índole”.

El pasado 23 de agosto, el presidente Petro se reunió en la Casa de Nariño con una delegación que envió su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, que fue encabezada por Rahul Gupta, director de la Oficina de Política de Control de Drogas de la Casa Blanca, en el marco de la cual se tocaron los temas de la política antinarcóticos, seguridad regional, agenda de paz y derechos humanos.

El Jefe de Estado explicó a los norteamericanos su política de paz total, para lo cual se propone a través del diálogo y la negociación la desmovilización de los grupos armados ilegales.

Les dijo que procurará una negociación política con la guerrilla del Eln y una negociación judicial con los grupos armados organizados, como el Clan del Golfo, que quieran someterse a la justicia a cambio de algunos beneficios judiciales.

Incluso, Petro planteó a los delegados de  Biden, no extraditar a los narcotraficantes que hagan parte de los grupos armados organizados que se acojan a su propuesta de paz.

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Respetan relación con Venezuela

El presidente Biden ha manifestado el respaldo de Estados Unidos a la consecución de la paz en Colombia y a la implementación del Acuerdo de La Habana, así lo expresó durante el gobierno Duque y ahora hace lo propio en la administración Petro.

De igual manera, la Casa Blanca se manifestó respetuosa hace unas semanas de la decisión del presidente Petro de restablecer las relaciones con Venezuela, a pesar de que el Gobierno norteamericano no reconoce a Nicolás Maduro como presidente, pues considera un fraude las elecciones en 2018, en las cuales éste alcanzó la reelección. 

“Respetamos el derecho soberano de los gobiernos a establecer relaciones diplomáticas”, dijo un portavoz del Departamento de Estado.

Agregó que Estados Unidos sigue “firmemente comprometido con el pueblo venezolano” y que seguirá trabajando con la comunidad internacional “para apoyar la restauración de la democracia y del Estado de derecho” en Venezuela.

Mientras que algunos senadores norteamericanos como Menéndez y Rubio les preocupa que Colombia restablezca relaciones con Venezuela, en cabeza del régimen de Maduro, al que consideran ilegítimo y violador de los derechos humanos; el Gobierno de Estados Unidos se ha mostrado cauto y no se ha  pronunciado a favor ni en contra sino respetuoso de las decisiones soberanas de nuestro país en ese sentido.

Sin embargo, sí habría preocupación en la administración de Biden porque el Gobierno colombiano le pidió a Nicolás Maduro que Venezuela sea país garante de las conversaciones de paz que Petro emprenderá con el Eln, comenzando por una reunión que se dará en los próximos días en ese territorio.

Por lo menos la preocupación de la Casa Blanca se nota por las palabras del  subsecretario Brian Nichols, como se citó al principio de este artículo de prensa.