EN el ojo de huracán político de sus copartidarios demócratas se encuentra alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, por respaldar la actuación de la policía, no solo en el incidente del ciudadano de color, George Floyd, hace dos días, sino porque reiteró que esa fuerza debe garantizar el orden ciudadano.

Como se sabe, la muerte del ciudadano Floyd, de 46 años, ocurrida luego de que un policía lo mantuviera de cara al suelo por varios minutos arrodillado sobre su cuello, degeneró en disturbios no solo en Minneapolis (Minnesota) donde ocurrió el hecho, sino en otros 15 estados, lo que llevó a la Casa Blanca a ordenar la salida a las calles de la Guardia Nacional.

De Blasio, quien anunció investigaciones sobre el hecho y reiteró que el policía responsable de la muerte de Floyd se encuentra detenido, acusado de asesinato en tercer grado y separado de la policía, defendió la actuación que ésta ha tenido para contener la violencia que, a juicio de muchos, ha sido desatada por anarquistas o narcotraficantes.

“Yo no culparía a quienes están intentando llevar una situación absolutamente imposible…Es inapropiado que los manifestantes rodeen un vehículo policial y amenacen a los agentes”, indicó sobre el hecho de que una patrulla embistió contra enfurecidos manifestantes que amenazaban con atacarlos.

Esta declaración desató un alud de críticas de miembros de su partido, el demócrata, entre ellas la congresista Alexandria Ocasio-Cortez quién le recordó que “como Alcalde, la policía está bajo su dirección. En este momento se exige liderazgo y rendición de cuentas de cada uno de nosotros…Defender y dar excusas cuando una camioneta de la policía de Nueva York embiste contra una multitud es un error”.

Entre tanto, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Robert O'Brien rechazó enfáticamente las voces que afirman que existe un "racismo sistémico" en la policía y ha atribuido incidentes, como el de Floyd, a unas pocas “manzanas podridas” en la policía. “El 99,99 % de los agentes de las fuerzas del orden son estadounidenses estupendos”, subrayó.

Indicó, igualmente, que la Guardia Nacional del Estado se ha desplegado en la ciudad de Minneapolis para “hacer el trabajo que el alcalde demócrata Jacob Frey no ha podido hacer” y agregó que de haberla usado a tiempo, “no se habrían registrado los saqueos a comercios y los daños al cuartel general de la policía”.

Por su parte el precandidato presidencial Joe Biden respaldó las manifestaciones convocadas en todo el país porque “protestar ante tal brutalidad es correcto y necesario. Es una respuesta completamente estadounidense”. Sin embargo aclaró que la quema de comunidades, la destrucción, la violencia que pone en peligro la vida y que destruye y cierra las empresas que sirven a la comunidad no lo es”.

Voces de Organizaciones No Gubernamentales como Amnistía Internacional reaccionan acusando a la policía de los Estados Unidos de incumplir con sus obligaciones con el derecho Internacional al aplicar una respuesta “excesiva, militarizada y alimentada por el racismo”.

Como se recordará después de que se diera a conocer un video que muestra el arresto de Floyd, en el que aparece el policía blanco, Derek Chauvin, con la rodilla sobre su cuello para someterlo, se ha desatado una ola de protestas, enfrentamientos y disturbios que se han extendido por todo el país, dejando al menos tres fallecidos (entre ellos un agente federal en Oakland), un gran número heridos, detenidos e incendios en las principales ciudades.

Para hacer frente a los desmanes la Guardia Nacional de Estados Unidos ha movilizado efectivos en al menos 15 Estados de la unión y en ciudades como Washington, Nueva York y Los Ángeles, en donde se han producido más de 500 arrestos desde hace dos días y en algunos de ellos se decretó el toque de queda.

Por su parte en la ciudad de Nueva York al menos 100 personas fueron detenidas y las protestas se mantienen en el barrio de Harlem, y los condados de Brooklyn y Queens. También las hubo frente a la Trump Tower, en Manhattan, emblemático edificio que simboliza el imperio financiero del presidente norteamericano.

Asimismo en la ciudad de Miami se ha decretado el toque de queda tras los disturbios y la policía confirmó decenas de detenciones que obligaron a la suspensión de los servicios de transporte público.

A pesar de que el policía Derek Chauvin, de 44 años, fue detenido y acusado de homicidio, los desmanes continuaron ayer en algunas ciudades.

Finalmente se informó el hallazgo, en la madrugada del ayer, del cuerpo de un hombre sin vida cerca de un vehículo incendiado en Minneapolis.

Sin identificar aún, el cadáver presentaba señales claras de traumatismos, dijo John Elder, vocero de la policía, quien agregó que la unidad de homicidios de la ciudad investiga el caso.