Con ópticas tan diferentes como los planteamientos bipartidistas se han interpretado los resultados de las elecciones de medio mandato (midterms) que si bien no han sido un remezón en el mapa político de la unión americana develaron nuevos escenarios en varios estados y, sobre todo, la posible ampliación de la baraja presidencial para el 2024.
Sin concluir el escrutinio a nivel nacional se vislumbra que los republicanos retomarán el control de la Cámara de Representantes -el que perdieron en 2018-, que la mayoría del Senado no se definiría sino hasta diciembre cuando se realice una segunda vuelta en Georgia entre los dos candidatos más votados, ya que ninguno logró el 50%+1 requerido; que Florida votó contundentemente conservador reeligiendo a sus candidatos al Congreso (Marco Rubio y María Elvira Salazar), arrebató cuatro bancas de la cámara baja a los demócratas y otorgó otro mandato al gobernador Ron de Santis con un contundente 59%. En la elección pasada también se impuso al demócrata Charlie Crist, pero por una mínima diferencia.
Estos son los hechos más relevantes poselecciones de medio término en el gigante del norte:
1. Con el ojo en el 2024. Sin el apoyo del líder republicano, Donald Trump, De Santis obtuvo una contundente victoria que no sólo confirma el anclaje a la derecha de Florida, considerado durante mucho tiempo un "estado indeciso" o bisagra, la consolidación de la misma en un condado de mayoría hispana como es Miami-Dade y que en las últimas décadas no había dado la victoria a un conservador, sino que se posiciona posible precandidato presidencial contra el mencionado expresidente, quien oficializaría el martes su aspiración por la Casa Blanca. Es muy temprano para saber si ambos se someterán a unas primarias o lo harán independientemente. En el campo demócrata y aunque Joe Biden ha reiterado que buscará la reelección para frenar a Trump, crecerá la oposición a tal posibilidad máxime si se enfrenta a la estrella ascendente de los conservadores, quien a sus 44 años y una exitosa gestión ha cautivado al electorado joven. Y aquí surge la pregunta: ¿Si no es Biden, ¿quién?
2. Redibujo político de Florida. El mapa político cambió en algunos estados, pero específicamente en Florida, fruto de múltiples factores que van desde su renovada composición demográfica hasta las políticas implementadas por sus gobernantes y representantes conservadores. La forma en que DeSantis manejó la pandemia del covid-19, quien como se
recordará se opuso a los requisitos de vacunación, al uso de mascarillas y permitió que las empresas y los colegios reabrieran mucho antes que el resto del país influyó, sin duda, en su contundente victoria. Vale recordar también que durante esa época de pandemia se dio una inusitada migración desde varias ciudades de la costa oeste hacia la llamada ciudad del sol, motivados por la flexibilidad de las medidas sanitarias. Es así como se convirtió en el estado con mayor concentración de voto hispano y que en estas midterms rompió la tradición de sufragar por la izquierda.
3. ¿Estancamiento legislativo? Descontado el control republicano de la Cámara, dada la tendencia irreversible a su favor a medida que avanzaba el escrutinio y a falta de definir 43 de los escaños, éstos lograban 204 frente a 187 de los demócratas, y pendiente del escrutinio en cuatro estados (Alaska, Arizona, Nevada y Georgia) que dirimirían el empate bipartidista (48 bancas) se vislumbra un escenario legislativo muy complicado para el presidente Joe Biden ya que a diferencia de estos dos primeros años de mandato logró con la leve ventaja de su partido en la cámara baja y el voto desempate de la vicepresidenta Kamala Harris en la otra, logró sacar avante algunos de sus proyectos (leyes ambientales, mayor control de armas, etc), pero los más ambiciosos como el Plan de Infraestructuras siguen en el tintero. En los últimos tiempos han crecido las voces críticas en torno a ese poder que se da a la vicepresidenta porque siendo elegida para el Ejecutivo tiene injerencia en el legislativo, aunque su modificación, que debe ser constitucional, es poco viable. Aquí será clave ver hasta dónde llegará el poder de los republicanos en la Cámara para flexibilizar o bloquear la gobernabilidad del mandatario demócrata.
4. Aplazada definición del Senado. Georgia vuelve no sólo a ser el sitio de definición electoral sino el ejemplo fehaciente de la marcada polarización política en Estados Unidos. Tradicionalmente ha estado partido en dos y en esta ocasión no fue la excepción al punto que el escaño para la Cámara Alta se dirimirá en una segunda vuelta en diciembre entre el actual senador y reverendo bautista, el demócrata Raphael Warnock, y la exestrella de fútbol americano, el republicano antiabortista Herschel Walker ya que ninguno alcanzó el 50%+1 voto requerido. Este último (60 años) entró tarde en política con la bendición de Trump y tras varios récords a su haber se le considera uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol americano universitario. En plena campaña una mujer le acusó de haberla impulsado a interrumpir su embarazo, en 1991, de lo que no hay evidencia. En los otros tres estados por definir, el triunfo será conservador en Alaska ya que ambos candidatos son de este partido, mientras que en Arizona la situación es contraria con Kelly aventajando por cinco puntos al republicano Maestros. En Nevada el duelo está muy parejo con ventaja para el conservador Laxalt (49.9%) frente a Cortez (47.2%).
5. Derecho al aborto. En estas elecciones de medio mandato también hubo referendos puntuales como la consagración en la legislación de cada estado el derecho al aborto y la aprobación del consumo libre de la marihuana recreativa, entre otros. Hacer legal la interrupción voluntaria del embarazo se definió en cinco estados, entre ellos dos (Michigan y Kentucky) donde estaba prohibido o severamente restringido. A ellos se sumaron Montana, California y Vermont, mientras que la prohibición se mantiene en 24 estados de la Unión americana. Así, en Michigan se dio el aval para que el Estado regule el aborto después de la vida fetal, excepto si es necesario para proteger la vida o la salud física o mental de la paciente, mientras en California se avaló que se convierta en un derecho en la Constitución local. Entre tanto los votantes de Vermont aprobaron una enmienda que protegerá “el derecho de cada persona a tomar sus propias decisiones reproductivas”, incluso sobre embarazos, aborto y control de la natalidad. Respecto al consumo de marihuana con fines recreativos para personas mayores a los 21 años, Maryland la aprobó y será posible a partir del próximo julio. En sentido contrario, es decir para prohibir esa medida, se pronunciaron masivamente los residentes de Missouri, mientras que Arkansas, Dakota del Norte y su vecina del Sur rechazaron las propuestas para legalizar la posesión y el consumo de cannabis.