El Covid-19 sigue propagándose con fuerza y en Latinoamérica, donde llegó más tarde que en Asia o Europa, comienzan a expandirse con gran velocidad, develando casos dramáticos como el que se vive hoy en Guayaquil, Ecuador.

Pese al confinamiento obligatorio ordenado por las autoridades, los casos siguen multiplicándose y específicamente en la mencionada ciudad ecuatoriana se desbordó el sistema de salud para atender los contagios, que a hoy suman 1.937 mientras los fallecimientos superan los 60.

Además de un notorio colapso en los servicios médicos, Guayaquil cuenta con un inconveniente de fuerza mayor en los sistemas funerarios, ya que, son muchos decesos  en pocas horas y no dan abasto.

Ante la situación, el presidente de Ecuador, Lenin Moreno, ordenó el rápido entierro de los fallecidos por el Covid-19 y también atender denuncias en el sentido de que hay personas que fallecieron en sus casas y sus cuerpos no han sido recogidos para llevarlos a los cementerios.

Pese a la acción del gobierno en conjunto con las funerarias, los habitantes de Guayaquil denuncian  que incluso un cadáver puede durar en una casa más de 72 horas en descomposición mientras las autoridades lo recogen, lo cual afecta la salud física, mental, psicológica y emocional de las personas afectadas.

De momento, Ecuador tiene 2.748 contagios y 93 fallecidos por la pandemia, siendo uno de los países de la región más afectados por la pandemia del coronavirus.