Una investigación llevada a cabo por un organismo de control de la Policía Metropolitana de Londres ha revelado un abanico de comportamientos negativos en agentes de la institución, incluido racismo, misoginia, acoso y la publicación de mensajes ofensivos en redes sociales.

La Oficina de Control del Comportamiento de la Policía (IOPC, puso en marcha la investigación después de recibir una queja sobre que un agente había mantenido relaciones sexuales con una persona ebria en una comisaría, pero se ha extendido más allá.

Se centra sobre todo en la comisaría de Charing Cross, en el centro de Londres. El organismo de control pidió más pruebas a otros agentes, que han revelado que sus colegas también practican 'bullying', violencia contra las mujeres, pervierten el curso de la justicia y usan un lenguaje discriminatorio.

La pesquisa ha concluido con dos agentes despedidos e incluidos en una lista que les prohíbe volver a trabajar como policías. Otros dos agentes han dimitido y a otros dos se les ha abierto un expediente.

Los investigadores han revisado miles de mensajes intercambiados entre agentes, muchos de los cuales descritos como "altamente sexualizados, discriminatorios o violentos". Cuestionados sobre los mismos, los agentes los han rebajado a la categoría de "bromas".

El director regional del IOPC, Sal Naseem, ha lamentado que los comportamientos hallados en la investigación son una "desgracia" y "cae muy por debajo de los estándares esperados" para los agentes de la Policía Metropolitana.

"Nuestra investigación muestra que el uso que los agentes hacen de la 'broma' cubre el acoso. Sus colegas estaban asustados por abordar estos comportamientos por miedo al ostracismo o ser despedidos", ha continuado Naseem, que ha dado las gracias a los policías que han levantado la voz, según ha recogido Sky News.

La Policía Metropolitana se ha disculpado por el resultado de la investigación y ha defendido que la conducta de los agentes no representa los valores del cuerpo.

El alcalde de Londres, Sadiq Khan, también ha mostrado su "disgusto" por los resultados de la investigación, al tiempo que ha calificado de "inaceptable" el comportamiento de los agentes investigados. "Lo revelado solamente dañará más la confianza de la ciudadanía en la Policía", ha lamentado.