NO LA ha tenido fácil el presidente argentino, Javier Milei, para implementar su severo, y, por tanto, impopular plan de ajuste para revivir una economía en rojo, galopante inflación y exorbitante déficit fiscal.
Del “no hay plata, no hay alternativa al ajuste, no hay alternativa al shock” que este economista de profesión aseguró el día de su posesión, el pasado 11 de diciembre se ha pasado, entre otros, a un superávit financiero (no se registraba desde 2008), un retroceso en la inflación, la rebaja en las tasas de interés y una recomposición de las alicaídas reservas brutas del Banco Central.
Ese mismo día, el autodenominado libertario, afirmó que “en el corto plazo la situación empeorará, pero luego veremos los frutos de nuestro esfuerzo”. Y eso es lo que, en medio de la oposición política de la izquierda, que además de hundir sus dos megadecretos en el Congreso atiza el descontento social, que parece empezar a verse en este país del Cono Sur, gracias precisamente a su hoja de ruta económica, la que ha sido reconocida por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, así como a su férrea decisión de “gobernar con o sin el apoyo de la dirigencia política”, como lo expresó en el Parlamento.
“Miren a Argentina, un país que durante mucho tiempo ha sido percibido como un rezagado desde el punto de vista de las reformas, ahora se está moviendo muy rápidamente en el ajuste del gasto fiscal, ganando la capacidad de la inversión privada”, sostuvo la directora del FMI, Kristalina Georgieva.
Milei ajusta hoy 141 días en la presidencia de Argentina, y estos son sus avances en materia económica:
- Superávit financiero. Esta semana el mandatario calificó como una “hazaña histórica” el primer trimestre con superávit financiero que registra el país desde 2008 y advirtió a la población que no espere una salida de la recesión “de la mano del gasto público”. El sector público registró en marzo un superávit financiero de más de 275.000 millones de pesos (USD 309 millones al cambio oficial), logrando de esta manera, y luego de más de casi 20 años, superávit financiero de 0,2% del PBI durante el primer trimestre del año. Milei está decidido a reducir a cero el déficit fiscal, una meta más ambiciosa de la que impone el FMI, con el que el país tiene un acuerdo crediticio por USD 44.000 millones.
- Retroceso inflacionario. Por tercer mes consecutivo, el aumento de los precios se moderó en marzo un 11%, acumulando en el primer trimestre 51,6%. Se mantiene elevada (287,9% interanual) en un contexto de desplome de la actividad económica, el que también empieza a ceder, ya que del -4,5% interanual en diciembre se pasó en febrero a -3.2%. Vale recordar que al llegar al poder Milei devaluó el peso en más del 50%, lo que generó una ‘erupción inflacionaria’ calculada y necesaria para desregular la economía, implementación que realiza otro gran economista, el ministro Luis Caputo, quien días atrás escribió en X: “la combinación de ancla fiscal, monetaria y cambiaria, y las que se vienen implementando para desburocratizar el comercio interior y normalizar el comercio exterior, son fundamentales para sostener este sendero de desinflación”.
- Cuarta rebaja de intereses. En lo corrido de este mes, el Banco Central de la República de Argentina ha hecho dos recortes en los tipos de interés (cada uno de diez puntos) llevando la tasa al 60%. Bajo este Gobierno, la rebaja en la misma ha sido de 73 puntos porcentuales y obedece, precisamente, al freno lento, pero sostenido en el costo de vida. Aunque se espera que el IPC sea también alto para este abril, el Gobierno confía en mantener su hoja de ruta descendente en este indicador para que el segundo trimestre del año sea notablemente mejor al primero, y se empiece a notar cierta relajación en el nivel de precios en todo el país, tal cual lo planeó en su programa para resucitar la economía.
- ‘Impresionante progreso’. Con esta frase el FMI ha exaltado los logros del presidente Milei en su empeño de estabilizar Argentina, admitiendo que “el camino nunca es fácil” y coincidiendo con el Banco Mundial en que “el ajuste era la única alternativa”. Julie Kozack, directora de comunicaciones del Fondo, destacó semanas atrás, cuando aún no se conocía el dato de marzo, que “en enero y febrero se registró un superávit fiscal por primera vez en más de una década, las reservas internacionales se están reconstituyendo, la inflación está cayendo más rápidamente de lo previsto y los indicadores de mercado como la brecha cambiaria y el spread soberano (costo de endeudamiento externo de un país) siguen mejorando”. Para este organismo multilateral, así como para el BM, es importante “seguir mejorando la calidad del ajuste fiscal” e ir adaptando la política monetaria durante la “transición”, pero instaron a que la dureza del ajuste no afecte a “los más vulnerables”.
- Metas del programa crediticio. En la más reciente evaluación del FMI, su director para América Latina y el Caribe, Rodrigo Valdés, indicó que Argentina ha cumplido con márgenes importantes las metas del programa crediticio con ese Fondo y elogió nuevamente la política de Milei. “El plan de estabilización ha dado mejores resultados de los que esperábamos en nuestra última revisión del programa, hay el primer superávit fiscal en una década, las reservas se están reconstruyendo firmemente, el balance del banco central se está fortaleciendo y la inflación, aunque todavía alta, está bajando más rápidamente de lo que anticipamos y la información preliminar también sugiere que los objetivos clave del programa hasta marzo se cumplieron con márgenes importantes”, precisó el economista chileno, optimista sobre la octava revisión, prevista en mayo, y que permitirá el desembolso de USD 800 millones.
- Cepo cambiario, en la mira. Para dar otro y decisivo paso en su plan económico, el ministro Caputo estuvo días atrás en Washington buscando del FMI los USD 15.000 millones que Milei necesita para eliminar el control cambiario. “Cuanto más rápido lo consigamos, más rápido levantamos el cepo cambiario”, declaró el presidente recientemente, refiriéndose a un control de cambios vigente desde 2019, que limita el acceso a dólares en un país con inflación históricamente alta en el que la divisa estadounidense oficia de valor refugio para los ahorros. La idea es que el Fondo le preste ese dinero. El Mineconomía argentino se reunió con la N. ° 2 del FMI, Gita Gopinath a quien expuso tanto los avances como las necesidades financieras inmediatas que tiene su país. Al igual que días previos lo había hecho con altos cargos del Gobierno estadounidense como el subsecretario de asuntos internacionales del Departamento del Tesoro.
- Intervención a medicina privada. En estos días también el Gobierno argentino ordenó a empresas de medicina privada retrotraer sus precios a diciembre pasado, cuando se desató una serie de aumentos tras el decreto de desregulación de la economía impulsado por Milei. “Por disposición del Ministerio de Economía, un grupo de empresas de medicina privada, que representa casi el 75% de los afiliados, van a retrotraer el valor de sus cuotas a diciembre de 2023, ajustado por el IPC”, anunció el vocero presidencial Manuel Adorni. Cuando Milei decidió liberar los precios de la economía, varias de estas empresas de medicina prepaga realizaron alzas hasta del 150% en sus servicios, lo que fue denunciado como una “presunta cartelización” que llevó a una medida cautelar ante la justicia y la orden presidencial de rebajar las tarifas.