El próximo 6 de junio, en exactamente una semana, dos importantes elecciones se llevarán a cabo en América Latina: la segunda vuelta presidencial de Perú entre Keiko Fujimori (Fuerza Popular) y Pedro Castillo (Perú Libre); y las elecciones intermedias en México que, durante las últimas semanas de campaña, han estado marcadas por una grave violencia electoral.
Con relación a las elecciones en Perú todo es incertidumbre. Si bien es cierto que las encuestas de hace una semana, que salieron publicadas el pasado viernes 21 de mayo aún demarcaban una diferencia, aunque estrecha, entre ambos candidatos, el último sondeo realizado por Datum Internacional y que se socializó hace dos días, pronostica un empate técnico entre Castillo y Fujimori.
De hecho, de acuerdo con esta última encuesta, la intención de voto de los peruanos indica que el 42,6% de los votantes seleccionarían al candidato Castillo, y un 41,7% optaría para la candidata de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, lo que representa, para cualquier efecto, un empate técnico.
Este sondeo muestra que la intención de voto de Castillo ha caído casi tres puntos porcentuales con respecto a la última encuesta, mientras que Fujimori ha logrado un aumento de casi un punto porcentual.
Una de las causas atribuibles al cambio de intención de voto sería el debate de los equipos técnicos de los candidatos que se llevó a cabo el pasado domingo. Entre las personas que declararon haber visto el debate, un 54% de las mismas consideró como ganador de dicho encuentro al equipo de Fuerza Popular, mientras que un 26% opina que salió victorioso el de Perú Libre.
La diferencia entre candidatos se ha acortado, pues es importante referir, a este respecto, que hace 10 días el candidato de izquierda se encontraba liderando la contienda con el 44.9% de la intención de voto, mientras que la candidata fujimorista marcaba el 40.1%.
No obstante, los análisis electorales también indicaron, frente a dicha encuesta, que la candidata fujimorista era la que más adeptos venía sumado y la que más había logrado acortar distancia en el terreno electoral en los últimos 45 días.
Es importante recordar, con relación a estas elecciones, que varios analistas y expertos en temas electorales y en política doméstica peruana, especificaron una vez pasó la primera vuelta electoral, que la lógica del “mal menor” determinaría el resultado electoral del balotaje.
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Antesala violenta en México
Más arriba en el continente, México celebrará el mismo día (domingo) las elecciones en las que serán renovados los 500 escaños de la Cámara de Diputados federal y se elegirán gobernadores de diversos estados y miles de cargos locales.
Estas elecciones han estado marcadas por la violencia ligada al crimen organizado y cientos de políticos han sufrido agresiones o han sido asesinados. De hecho, de acuerdo con el recuento de la consultora Etellekt que salió publicada hace dos días, entre candidatos y precandidatos ya se suman 34 víctimas, de un total de 88 políticos asesinados desde que inició el proceso electoral, en septiembre pasado.
Uno de los candidatos amenazados ha sido Julio González, quien a diario reza para volver con vida a casa pues está amenazado y teme engrosar la lista de candidatos asesinados. González, de 39 años, busca la alcaldía de Dolores Hidalgo (estado de Guanajuato, centro), en un proceso teñido de sangre por la muerte violenta de al menos 14 aspirantes en todo el país en los últimos dos meses, según indicó el pasado viernes el gobierno.
El caso más reciente se produjo el martes cuando pistoleros mataron a Alma Barragán, de 60 años, quien competía por la alcaldía de Moroleón, también en Guanajuato.
"Salgo de mi casa, de campaña, y en el momento que subo a mi carro digo: En el nombre sea de Dios, yo creo que todo saldrá bien y regresaré con bien a este lugar'", cuenta González a la AFP durante una jornada proselitista. En esos actos, el político independiente promete desterrar a las "ratas", refiriéndose a supuestos funcionarios corruptos. Es importante referir que este es el segundo intento de González por llegar al cargo, tras quedar segundo en 2018 y en ambas campañas la constante han sido las amenazas y agresiones. En marzo, desconocidos arrojaron bombas incendiarias contra su casa, mientras él y su equipo son intimidados continuamente en redes sociales.
También "hay presencia de gente con armas, de vehículos sospechosos que nos siguen", denunció el candidato junto a un guardaespaldas privado.
Para el presidente izquierdista, Andrés Manuel López Obrador, esto se trata de un plan del crimen organizado para ampliar su poder.
Vencer el miedo
Pero en Guanajuato la violencia ya había probado ser más que un disuasorio. El 29 de marzo fue asesinada Alejandro Galicia, aspirante a legislador del municipio de Apaseo el Grande.
Ese estado -donde operan bandas dedicadas a robar combustible- suma casi 1.300 homicidios este año, una de las cifras más altas de México, donde han sido asesinadas unas 300.000 personas desde que en 2006 el gobierno lanzó un operativo militar antidrogas.
"Nos da miedo, pero vamos a ganar, con todo y miedo", afirma González.
El gobierno, que denuncia la existencia de un "partido del crimen organizado", reporta además 400 agresiones a aspirantes y brinda protección a 148. Pero algunos como Érika Cortés, que postulaba a una alcaldía de Veracruz (este), prefirieron renunciar.
Los criminales "buscan fortalecer su operación mediante la intimidación y el aumento de su influencia política", sostiene la ministra de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez.
Tras la sangrienta campaña de 2018, cuando fueron asesinados 152 políticos (48 candidatos), las amenazas son ahora el principal instrumento de violencia electoral, según Etellekt. Así mismo, un 89% de los aspirantes asesinados en el actual proceso eran opositores a los gobiernos que buscaban sustituir, subraya la consultora.
"Desgraciadamente es una herramienta política, usas la violencia para llegar a un fin que es ganar más poder, ganar elecciones, votos, terreno, clientela, recursos", opina Romain le Cour de la consultora Noria Research. Tal estrategia se apoya en la impunidad, pues en la presente contienda, por ejemplo, solo ha habido detenciones en tres de los asesinatos, explica Rubén Salazar, director de Etellekt.
Ante la violencia, que incluye secuestros, una misión de observadores de la OEA expresó el miércoles su "profunda preocupación". Los mexicanos elegirán a los integrantes de la Cámara de Diputados federal, a 15 de 32 gobernadores y a miles de funcionarios locales.
Pese al peligro, el equipo de González se muestra animado y confiado en la victoria. "Cuando tomé la decisión de participar estaba consciente que me iba a exponer y estoy dispuesto a pagar el precio que tenga que pagar", finalizó diciendo el candidato.