Panamá busca borrar su imagen de paraíso fiscal | El Nuevo Siglo
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Jueves, 28 de Noviembre de 2019
Agence France Presse

UNA importante delegación a París para hablar con miembros de la OCDE, la UE, y el gobierno francés con el objetivo de borrar la imagen de paraíso fiscal que persigue al país desde el escándalo de los llamados papeles de Panamá, envió ese gobierno del itsmo.

El ministro de Finanzas, Hector Alexander, acompañado de la viceministra de Exteriores, Erika Mouynes, llegaron a París el lunes, en vísperas del décimo aniversario del Foro Mundial sobre Transparencia Fiscal de la OCDE. Y tienen varios encuentros previstos hasta el viernes.

Su objetivo: explicar a sus interlocutores que el país centroamericano, que alberga un importante centro financiero, está decidido a "cambiar completamente" su imagen desde la llegada al poder del presidente Laurentini Cortizo en julio.

"Quisimos venir para decir alto y claro que el proyecto de nuestro gobierno no sólo se limita a las palabras, sino también a acciones muy concretas", dijo Mouynes a la AFP, asegurando que su gobierno ha hecho de la "transparencia fiscal" una prioridad.

Según ella, la "competitividad" de Panamá a nivel internacional depende del cumplimento de las normas internacionales. "Debemos ir mucho más lejos para que los inversionistas nos identifiquen como un país estratégico en donde se atraen buenos negocios, se respetan todas las normas internacionales y locales". 

Sin embargo, según una evaluación reciente de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) Panamá sólo cumple "parcialmente" con los estándares internacionales.

"Esta es una evaluación del período anterior a nuestra llegada al gobierno", aseguró la viceministra.

Del lado de la OCDE, el nuevo gobierno dejó una buena impresión. "Hemos recibido buena información y el nuevo equipo parece decidido a ir más allá", dijo una fuente cercana a la institución. 

Mouynes se comprometió a que la legislación fuera aprobada a finales de año y recordó las medidas ya adoptadas por su gobierno, como la eliminación de "casi 600.000 empresas de las 800.000 registradas en Panamá" que no cumplían con los criterios internacionales". 

Todo esto en respuesta al escándalo de los papeles de Panamá que estalló después de la publicación de 11.5 millones de documentos confidenciales de la firma de abogados Mossack Fonseca, que detallaban información sobre más de 214.000 compañías offshore.

El ministro Héctor Alexander presentó estas medidas al Comisario europeo saliente de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, quien le advirtió de los riesgos para Panamá de ser incluido de nuevo en la lista negra de la Unión Europea si no aplica las medidas necesaria en la materia antes de finales de año.

En la lista francesa figuran siete países: Brunéi, Nauru, Niue, Panamá, Islas Marshall, Guatemala y Botsuana.