El gobierno británico, conservador, anunció el lunes un aumento del 47% del salario mínimo necesario para obtener un visado de trabajo, como parte de una serie de medidas para reducir la inmigración neta en los próximos años.
El ministro del Interior, James Cleverly, anunció en el Parlamento un importante ajuste que impedirá a los empleados del sector sanitario traer a familiares y aumentará el salario mínimo anual exigido para trabajar en Reino Unido en los demás sectores.
La próxima primavera boreal subirá a 38.700 libras (48.800 dólares), similar al sueldo medio a tiempo completo, frente a las 26.200 libras actuales.
El gobierno de Rishi Sunak, ampliamente desbancado en las encuestas por la oposición laborista de cara a las elecciones del año que viene, se esfuerza por adoptar una línea firme para reducir la inmigración, tanto legal como ilegal.
Cleverly prometió ante el Parlamento "la mayor reducción" jamás registrada de la inmigración neta y desveló una serie de medidas que permitirán que en los próximos años lleguen a Reino Unido "300.000 personas menos que el año pasado".
Según las estadísticas oficiales publicadas a finales de noviembre, la inmigración neta (diferencia entre las llegadas de extranjeros y las salidas) ascendió a 745.000 personas el año pasado, muy por encima de la estimación inicial de 606.000.
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