Tres colombianos decidieron viajar a la provincia de Lugo, en España, ya que les fue prometida una mejor calidad de vida, un buen salario y papeles legales mientras realizaban trabajos varios. La empresaria que contactó con ellos les compró los tiquetes para el viaje, pagó la estadía en un hotel y también los seguros médicos; no obstante, la promesa se trató de una farsa.
La mujer se aprovechó de la situación legal del trío de latinos para someterlos a condiciones inhumanas. Los tres vivían en la granja de cerdos en la que trabajaban y, según reportó el diario El País de España, dormían sobre "un colchón con los muelles reventados" y un sofá cama. Asimismo, en el diario se señala que lo único para lo que podían usar la cocina era para obtener agua, la cual provenía de un río; por ello, la misma llegaba "la mayoría de las veces llena de barro".
Tampoco contaban con acceso a medicinas o atención sanitaria, sufriendo de diarrea o vómitos; los únicos medicamentos que tenían en su poder fueron los que llevaron para el viaje. Y si necesitaban utilizar el inodoro, no podían, ya que las cañerías estaban tapadas.
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Qué horror de historia - Esclavos humanos colombianos en una granja de cerdos en Galicia https://t.co/0KLG98ATLs vía @elpais_espana
— Andrés Bermúdez Liévano (@bermudezlievano) 24 de abril de 2018
En el medio destacan otras de las paupérrimas condiciones de la vida de los colombianos en el sitio: había un olor nauseabundo y humedad en el techo, así como también se encontraron ratones muertos por el suelo; todas estas condiciones fueron verificadas por miembros de la Policía nacional, quienes se acercaron al sitio ya que "terceras personas" comunicaron que podía haber una explotación laboral en la granja. Así lo reveló el subdelegado del Gobierno en Lugo, Ramón Carballo.
Cuando los uniformados comprobaron la situación, procedieron a detener a la empresaria. Según se detalla en El País, la misma es investigada por presunta trata de seres humanos con fines de explotación laboral y un delito contra los derechos de los trabajadores.
Debido a las condiciones a las que fueron sometidos, las autoridades decidieron concederles tres meses de estadía en España para que regulen su estatus migratorio, en caso de que deseen quedarse en el país. Este proceso podrán realizarlo mientras se adelanta el juicio contra la mujer.