Ocho presuntos disidentes de las Farc murieron y tres más resultaron heridos en desarrollo de operativos militares en el departamento de Putumayo.

Los once formaban parte del llamado Frente Séptimo que es comandado por Édgar Salgado, conocido como Rodrigo Cadete, un reconocido exjefe de las Farc que dio la espalda al acuerdo de paz de 2016 a pesar de haber participado del proceso e integrar las listas de desmovilizados.

“Entre los neutralizados (muertos) se encuentra alias ‘Cachorro’, segundo cabecilla y mano derecha de ‘Cadete’”, señaló el Ministerio de Defensa, Luis Carlos Villegas en Twitter.

Los combates se dieron en el municipio de Puerto Guzmán, limítrofe con el departamento del Caquetá.

Antes de desertar de la ya disuelta guerrilla, los subversivos de ese frente estuvieron implicados en la muerte de decenas de militares y civiles, así como en el secuestro y desaparición de uniformados, según inteligencia militar.

A su vez, ‘Cadete’ es señalado de tener vínculos con el tráfico de cocaína y coltán (empleado en la industria tecnológica) hacia Venezuela y Brasil.

Sin un mando unificado, las disidencias de las Farc operan en varios puntos del país y, según el ejército, contarían con un pie de fuerza de 1.200 combatientes.

Las autoridades arreciaron las persecución contra los disidentes después de que el frente 'Oliver Sinisterra', al mando de un disidente conocido como ‘Guacho’, secuestró y asesinó a un equipo ecuatoriano de prensa en la frontera con Ecuador.

Justamente ‘Guacho’ tiene secuestrados a dos civiles y las autoridades ecuatorianas investigan si un militar de ese país fue secuestrado por este reducto.

Aunque el pacto de paz disminuyó sensiblemente la intensidad del conflicto colombiano, todavía operan rebeldes guevaristas y bandas armadas del narcotráfico.

Este resultado se suma al de las últimas horas, en el que el Ejército logró la ubicación de un depósito ilegal con abundante material de guerra e intendencia, propiedad del Grupo Armado Organizado Residual de las Farc, Columna Móvil Jacobo Arenas.

El hallazgo se dio en la vereda La Dorada del municipio de El Tambo, Cauca. Allí las tropas encontraron dos estructuras abandonadas que tenían en su interior más de 10 mil municiones de diferentes calibres, 19 granadas de 40 milímetros, 73 proveedores, una pistola, nueve equipos de asalto, cinco chalecos multipropósito, un celular y uniformes de uso privativo de las FF. MM. y de Policía.