DURANTE LA Comisión de Gobierno, el concejal José Cuesta Novoa inició su intervención reflexionando sobre la relación entre justicia y seguridad, cuestionando qué tipo de justicia se necesita para combatir el delito y garantizar niveles adecuados de seguridad en Bogotá.
DURANTE LA Comisión de Gobierno, el concejal José Cuesta Novoa inició su intervención reflexionando sobre la relación entre justicia y seguridad, cuestionando qué tipo de justicia se necesita para combatir el delito y garantizar niveles adecuados de seguridad en Bogotá.
El cabildante compartió en sus redes sociales un vídeo de un hecho ocurrido en la madrugada del día anterior en el barrio La Campiña, localidad de Suba. En las imágenes, se observa a particulares armados ejerciendo una autoridad que, a su juicio, no les corresponde y vulnerando los derechos humanos de los jóvenes. Ante esta situación, el concejal exigió respuestas al secretario de Seguridad sobre las medidas adoptadas frente al fenómeno de la justicia privada.
El concejal alertó sobre el riesgo de que esta situación se propague, señalando que estos actos reflejan una tendencia peligrosa hacia la justicia por mano propia. Cuesta calificó este fenómeno como un indicio de para estatalidad, en el que civiles armados sustituyen a las autoridades legítimas, una práctica que podría dar paso al paramilitarismo.
El concejal Cuesta destacó dos delitos de alto impacto: la extorsión y los homicidios. Señaló que, aunque las cifras de extorsión varían, actualmente se registra un incremento superior al 70% respecto a los niveles de 1993, e incluso hay quienes estiman que podría superar el 83%.
Asimismo, expresó su preocupación por la tasa de homicidios, el principal indicador de seguridad en cualquier ciudad del mundo. Según sus datos, al cierre del 2023, la tasa de homicidios fue de 13,6 por cada 100.000 habitantes, con un total de 1.003 homicidios registrados. Sin embargo, advirtió que la cifra podría ser considerablemente mayor este año. Hasta el 30 de noviembre de 2024, se registró un incremento de 120 homicidios en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Cuesta subrayó que diciembre es tradicionalmente un mes crítico para la seguridad, con fechas como la noche de las velitas, las novenas de aguinaldos y las celebraciones del 24, 25 y 31 de diciembre, que suelen complicar la situación. Ante esto, anticipó que la tasa de homicidios podría superar el 15% para finales de este año.
Finalmente, el concejal concluyó su intervención reiterando la urgencia de abordar de manera estructural el problema de inseguridad en Bogotá y de evitar el auge de prácticas de justicia privada que vulneran el orden institucional y los derechos ciudadanos.
Bandas delincuenciales
A su turno, el concejal Julián Rodríguez Sastoque advirtió que son 29 las bandas delincuenciales con presencia en Bogotá, de acuerdo con registros de la Fiscalía General de la Nación; organizaciones criminales fortalecidas, que han hecho que 2024 sea el año más violento en Bogotá, en los últimos 8 años.
“En este mismo sentido, encontramos que 680 de los homicidios cometidos en Bogotá, en 2024, se perpetraron con armas de fuego, evidencia del recrudecimiento de la violencia en la que está sumida nuestra ciudad. Entre tanto, Bosa, Suba, Usme y Kennedy son las localidades en las que la Fiscalía reporta mayor presencia de estas bandas criminales, allí actúan Cronos, Los DR, Bloque Capital, Cataleya y el ya tristemente célebre Tren de Aragua, entre otras, dedicadas al homicidio, el hurto, el tráfico de estupefacientes, el secuestro extorsivo y demás actividades ilícitas”, reveló.
La extorsión es otro de los delitos disparados en Bogotá. En el 2024 se denunciaron 2437 casos, que dejaron en evidencia un alarmante incremento del 75% frente a 2023. Es decir que, según afirmó Sastoque, también estamos viviendo el año con más extorsiones en la historia reciente de Bogotá.
“El segundo semestre de 2024 fue particularmente violento, en comparación con el mismo periodo de 2023. Verificando las cifras de homicidios mes a mes, de julio a noviembre, se calcula un aumento de 32,4%, pasando de 436 casos en 2023 a 577 casos en 2024”, agregó.