Tabatinga, a orillas del río Amazonas, es una ciudad brasileña en la triple frontera de ese país con Colombia y Perú.

Su alcalde, Saul Bemerguy, señaló que la entrada desde Leticia está cerrada y solamente pasa abastecimiento de mercancía, medicina y ayuda humanitaria.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es la situación actual de Tabatinga?

SAUL BEMERGUY: La pandemia está avanzando y a la fecha están confirmados 495; los fallecidos 46, los curados 84, las personas que están en casa siendo monitoreadas, que son 423 y 31 personas, que hay hospitalizadas o internadas.

Estamos montando un grupo para confirmación de todos los que tengan síntomas y van apareciendo como casos confirmados. Están promoviendo el distanciamiento y el uso obligatorio de tapabocas.

ENS: ¿Cómo es la situación de la frontera en estos momentos?

SB: La entrada para Leticia está cerrada. Solamente pasan abastecimientos de mercancía, medicina, ayuda humanitaria, entre otras.

ENS: ¿Qué decirles a los habitantes de Tabatinga?

SB: En lo posible, que las personas permanezcan en casa, que el virus no se detecta inmediatamente, sino la probabilidad es que las personas lleguen enfermas después de una o dos semanas al hospital, y muy graves.

Las personas deben permanecer en casa y no deben salir por cualquier situación, sino cuando sea necesario.

Debo decirle a las personas que no todo el que tenga síntomas quiere decir que va a morir, la verdad no. Pueden mejorar con medicamentos y solo unos pocos tienen que ir al hospital. Lo mejor es quedarse en casa.

ENS: ¿Cómo ha sido trabajar con un Presidente que no cree en la pandemia?

SB: Sobre el distanciamiento social, el Presidente dice que no se haga, a pesar que la OMS recomendó que los países debían adoptar normas para el distanciamiento entre las personas. Pero el Supremo Tribunal Federal dio la orden que, a pesar que el Presidente dio esa orden, los estados y municipios son autónomos para adoptar normas que garanticen el distanciamiento social, que los gobernadores y los alcaldes pueden establecer decretos para ello, que entonces el Presidente aunque quiera liberar o desconocer esas normas, ellos continuarán en la labor de protección de la comunidad, porque ellos están conscientes que están hablando de vidas.

Ha sido un poco difícil trabajar con las autoridades militares y policiales, especialmente a nivel federal, pero se ha avanzado bastante. Por lo pronto se ha estado coordinando de la mano con el gobernador del estado Amazonas, Wilson Lima.

ENS: ¿Cómo es el sistema de salud de Tabatinga?

SB: La salud de Tabatinga trabaja con un sistema de bolsa de salud que da prioridad a las comunidades indígenas. La salud de ellos está a cargo del Estado y del hospital de guarnición (militar) que es del poder federal.

La obligación de los alcaldes es la atención básica. En Brasil hay una ley que señala que a cada enfermo debe tener apoyo del municipio, el Estado y de la unión federal.

La ley permite la atención a personas extranjeras, por lo que también se atienden colombianos y peruanos, que se presenta un flujo grande de personas extranjeras para atender por ser una triple frontera.

ENS: ¿Cómo se ha hecho para atender a los grupos indígenas?

SB: Existe un decreto que establece que los indígenas no pueden salir de las aldeas y que nadie puede entrar a estas. Ellos están siendo monitoreados por el Ejército, la Policía Federal y Policía Civil; se está haciendo un monitoreo intenso, con vigilancia en las aldeas. Se les está llevando algunos materiales, se les da dinero de programas sociales, ropa y comida para los niños. El fin es mantenerlos aislados, contener el contagio y gracias a Dios esto se está controlando.