El Frente Comuneros del Sur, agrupación guerrillera activa en Nariño, hizó público su distanciamiento tanto del Comando Central como de la dirección nacional del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Esto fue comunicado mediante un video difundido en redes sociales, donde también reiteraron su intención de involucrarse en los espacios de paz regionales en el departamento.
"De manera unánime la asamblea define declarar la ruptura con el comando central y con la dirección nacional, lo anterior conlleva a no aceptar el trato de agresión y el actual modelo de conducción desde el exilio político", expresó un portavoz identificado como 'comandante Roberto', representante del Frente Comuneros del Sur.
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Además de esta ruptura, el grupo subrayó su interés en participar activamente en iniciativas de paz en Nariño, como el proceso de desminado humanitario. "La asamblea manda a mantenernos en el proceso de negociación política entre el Frente Comuneros del Sur y el Gobierno nacional, bajo la política de 'paz total' del presidente Petro", añadió el portavoz.
El Frente Comuneros del Sur ha argumentado diferencias sustanciales con la dirección central del ELN, señalando una supuesta agresión y discrepancias en la gestión del grupo a nivel nacional. Este desencuentro se veía venir, especialmente después de que el Frente Comuneros del Sur expresara su disposición de integrarse en los diálogos regionales liderados por el gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar.
A pesar de esta separación, el Frente Comuneros del Sur ratifica su compromiso con la paz territorial en Nariño. Esto incluye su participación en el proceso de desminado humanitario, una tarea crucial para la estabilidad y seguridad de la región.
La decisión de este frente guerrillero plantea interrogantes sobre el futuro de las negociaciones a nivel nacional entre el gobierno y el ELN. La delegación gubernamental había solicitado al presidente Gustavo Petro tomar decisiones respecto a la viabilidad de mantener conversaciones con ambas facciones o centrarse exclusivamente en el Frente Comuneros del Sur como entidad separada del ELN.
La ruptura podría abrir la puerta a nuevas dinámicas de diálogo y acuerdos específicos con el Frente Comuneros del Sur, permitiendo así avanzar en la resolución de conflictos de manera más focalizada y efectiva en la región de Nariño.
En última instancia, esta separación marca un momento significativo en el panorama del conflicto armado en Colombia, planteando desafíos pero también oportunidades para consolidar la paz y la seguridad en Nariño y potencialmente en otras áreas afectadas por el conflicto.