Invertirán $460 millones para la protección del oso andino en Manta | El Nuevo Siglo
En las veredas Palmar Arriba, Manta Grande Arriba y Quimbita, se desarrollara la ciencia participativa, que permitiría concientizar a los habitantes de estas regiones sobre la importancia del oso andino. Foto: CAR Cundinamarca
Miércoles, 29 de Enero de 2025
Redacción Web

Con el objetivo de fomentar la conservación del oso andino y mitigar los conflictos entre la fauna silvestre amenazada y las comunidades de tres veredas del municipio de Manta, la Gobernación de Cundinamarca, a través de la Secretaría del Ambiente, y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) firmaron un convenio interadministrativo para fortalecer las acciones de protección de esta emblemática especie. 

El proyecto busca mitigar los conflictos entre osos y humanos mediante un enfoque de ciencia participativa. Esto incluye abordar las "interacciones negativas", que ocurren cuando el contacto entre humanos y la fauna genera reacciones adversas para ambas partes, como daños físicos, alteraciones en el comportamiento de la especie o impactos en el bienestar de las personas.
 
El convenio contempla una inversión de $460 millones de pesos, de los cuales, 300 millones serán aportados por la CAR y los $160 millones restantes por la Secretaría de Ambiente y se llevará a cabo en las veredas Palmar Arriba, Manta Grande Arriba y Quimbita, en el municipio de Manta. Estas áreas, consideradas clave para la protección del oso andino requieren de un manejo integral para reducir las interacciones negativas entre la fauna y las actividades humanas.

“Es importante trabajar con las comunidades para resolver los conflictos socio ambientales que se generan en torno a la presencia de biodiversidad en nuestro territorio. La presencia del oso en el municipio de Manta es una bendición y tenemos que saber aprovecharla para que las comunidades se sumen a las acciones de conservación y lejos de ver a nuestra biodiversidad como una enemiga, la veamos como una gran aliada y como la posibilidad de fomentar turismo de naturaleza.” afirmó el director general de la CAR, Alfred Ballesteros.

Para la puesta en marcha de las acciones previstas en el convenio, se establecerán acuerdos de conservación con las juntas de acción comunal de las mencionadas veredas, para promover prácticas productivas sostenibles y la restauración de áreas degradadas, como la siembra de praderas y la instalación de cercas eléctricas para reducir las interacciones con los osos.

El proyecto se desarrollará en tres fases. En la primera fase, se realizará un diagnóstico de los usos del suelo en el área de intervención mediante fotogrametría con dron y talleres con la comunidad. La segunda fase estará enfocada en la firma de acuerdos con las Juntas de Acción Comunal para la reconversión de modelos productivos, mientras que la tercera fase incluirá un monitoreo continuo de la población de Oso Andino a través de cámaras trampa, lo que permitirá evaluar la frecuencia e intensidad de los conflictos y mejorar las estrategias de manejo.

Por su parte, el secretario de ambiente de Cundinamarca Diego Cárdenas Chalá subrayo “este proceso va a ser  muy importante porque es una apuesta para minimizar ese conflicto entre la sociedad civil y el oso de anteojos, una especie protegida, además nuestra especie simbólica y paraguas de los bosques andinos”.