El 86% de despojos de tierras en el Caquetá fue responsabilidad de la entonces guerrilla de las Farc, según ha podido establecer la Unidad de Restitución de Tierras con base en los reclamos que han presentado campesinos de este departamento del país.

Son más de 4.000 hectáreas que podrán ser devueltas a sus legítimos dueños por el trabajo que se ha adelantado en este sentido, indicó la Unidad de Restitución de Tierras. Estas tierras están ubicadas en las zonas rurales de los municipios de Morelia, La Montañita, El Paujil, El Doncello, Puerto Rico y San Vicente del Caguán.

Las familias reclamantes fueron obligadas a salir de sus predios hace más de dieciséis años, atemorizadas por hechos violentos como homicidios, reclutamiento forzado, amenazas de muerte, secuestro, despojo y abandono forzado, entre otros hechos cometidos por las Farc y los paramilitares entre los años 1999 y 2014.

La directora de la Unidad de Restitución de Tierras en el departamento del Caquetá, Angélica Rodríguez Cely, afirmó que se ha logrado establecer que las Farc despojaron el 86% de las tierras. “Entre las demandas entabladas por la Unidad de Restitución de Tierras Caquetá se encuentran casos con historias de vida desgarradoras como la de Carlos*, un padre de familia a quien le habían secuestrado a su hijo y, una vez fue dejado en libertad, los guerrilleros intentaron presionarlo para enlistarlo en sus filas. Ante la negativa, las Farc asesinaron al joven, por lo que el padre se vio obligado a abandonar su predio y huir con el resto de su familia para proteger su vida”, explicó la funcionaria.

Algo similar le sucedió a Virginia*, quien también fue víctima de las Farc. Ella, por no colaborar y no ser parte de las actividades convocadas por este grupo armado, vio cómo fue asesinado su esposo, hecho que la hizo desplazarse de la tierra que con esfuerzo y dedicación había conseguido.

“Estas son algunas de las historias de familias caqueteñas que han dejado de lado el dolor, que han confiado en la paz, y que han decidido regresar al campo, esperando que los jueces restituyan sus predios y, de esta manera, puedan retornar a sus hogares y cosechar los frutos de sus tierras, reactivar su economía y vivir en total tranquilidad”, indicó el organismo.