La segunda temporada de lluvias, que ya ha cobrado más de 120 vidas, mantiene en alerta a buena parte del país ante la posibilidad de inundaciones, nuevos deslizamientos de tierra y daños a carreteras.

“A nivel nacional las lluvias continuarán, especialmente, en la Región Andina, Orinoquía, el Eje Cafetero y la Amazonía, razón por la cual no hay que bajar la guardia, mantener los planes de contingencia activos y tomar las medidas de prevención posibles para evitar que se sigan presentando emergencias”, dijo Eduardo José González, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres.

Se espera que, según ha reportado el Ideam, la temporada de lluvias culmine a mediados de diciembre. Se prevé también con un 90% de probabilidades, que un fenómeno del Niño moderado se presente, lo que contribuiría a que las lluvias disminuyan.

La temporada invernal, a los largo del año ha generado más de 1.200 eventos en 580 municipios de 30 departamentos y un poco más de 75.000 familias afectadas.

Esta semana los principales afectados fueron los habitantes de Santa Marta, principalmente los de los barrios Esmeralda, Buenos Aires, Oasis, Alpes y Timyuí.

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Después de adelantar el Comité extraordinario Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres en Magdalena, presidido por la gobernadora Rosa Cotes, el alcalde de Santa Marta, Rafael Martínez,  y el Director de la Ungrd, se estableció el plan de acción para mitigar el impacto que esta segunda temporada de lluvias ha tenido sobre algunos barrios de la capital del Magdalena, luego de presentarse el desbordamiento del río Manzanares, en la ciudad de Santa Marta.

En dicha reunión la Ungrd determinó cuatro puntos importantes para dar solución y respuesta a las familias afectadas por las lluvias, entre las que se encuentran: Que el municipio cuente con la asistencia humanitaria de emergencia; que se entregue apoyo a las familias afectadas para rehabilitar y arreglar las viviendas averiadas a través de combos de materiales de construcción una vez se haga la evaluación técnica. Posteriormente se entregarán subsidios de arriendo y se realizará una transferencia de recursos para atender con maquinaria amarilla la zona inundada.