Reportan otro hostigamiento a estación de Policía en Morales, Cauca | El Nuevo Siglo
El enfrentamiento lo están sosteniendo uniformados de la Policía y unidades del Ejército, que se encuentran en apoyo a los miembros de la institución policial. / Foto: captura de pantalla
Martes, 18 de Junio de 2024
Redacción Web

En la noche de este martes, la estación de Policía de Morales, Cauca, sufrió otro hostigamiento por parte de las disidencias de las Farc, intensificando la crisis de seguridad en la región.

Según reportes, el ataque comenzó en horas de la noche, obligando a los uniformados de la Policía Nacional y del Ejército a responder de inmediato para repeler la agresión.

Los disidentes, que operan en esta región, iniciaron el ataque con ráfagas de fusil dirigidas contra la estación de Policía, generando pánico entre los habitantes del municipio. Las fuerzas combinadas de Policía y Ejército, que ya se encontraban en la zona debido a la creciente inseguridad, respondieron al ataque con contundencia, evitando que los atacantes lograran su objetivo de causar mayores daños y posibles bajas entre las fuerzas de seguridad.

En medio del enfrentamiento, los civiles quedaron atrapados entre el fuego cruzado, con varios establecimientos comerciales cerrando sus puertas ante el sonido de las balas que resonaban por todo el pueblo. 

A pesar de la gravedad del ataque, las autoridades no reportaron heridos entre los uniformados ni la población civil. Sin embargo, este nuevo incidente subraya la tensa situación de orden público en el suroccidente del país, donde las disidencias de las Farc han incrementado sus ataques desde el levantamiento del cese al fuego en marzo pasado.

Las disidencias, lideradas en esta zona por alias Mordisco, han adoptado diversas tácticas de ataque, desde el uso de explosivos lanzados desde volquetas hasta la utilización de drones para detonar explosivos. Aunque en esta ocasión no se utilizaron estos métodos, la capacidad de ataque de este grupo armado sigue siendo una preocupación constante para las autoridades y la población local.

La presencia de las Fuerzas Militares y de Policía en el Cauca ha sido reforzada en las últimas semanas, en un intento por contener la escalada de violencia. Sin embargo, los hostigamientos continúan, poniendo en evidencia la complejidad del conflicto y los retos que enfrenta el gobierno de Gustavo Petro para restablecer la seguridad en esta región.

En otras áreas cercanas, como Jamundí, también se han registrado recientes ataques por parte de las disidencias, exacerbando el clima de inseguridad y temor entre los habitantes. Líderes comunitarios han denunciado que estos grupos armados ejercen un control estricto sobre las actividades diarias, imponiendo horarios de comercio y limitando la movilidad de los residentes.