En un comunicado oficial, la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expresó su preocupación por los recientes acontecimientos en el departamento de Cauca y solicitó al Gobierno colombiano la adopción de medidas urgentes para proteger a los pueblos indígenas de la región.

"Ante la gravedad de los hechos ocurridos en Cauca en los últimos días, la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos acoge las decisiones tomadas por el Plan de Vida Proyecto Nasa (Toribío, Cauca), a las que se sumó la Cxhab Wala Kiwe-Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN)" dije la misiva.

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Los hechos que desencadenaron esta solicitud se refieren a ataques perpetrados por grupos armados no estatales contra el Pueblo Indígena Nasa, incluyendo disparos indiscriminados, homicidios, reclutamiento de menores, y la violación de la autonomía y derechos colectivos de esta comunidad.

En respuesta a estas agresiones, la Oficina de la ONU destacó la valiente decisión tomada por el Plan de Vida Proyecto Nasa y la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN) de defender la vida de su pueblo. Estas decisiones incluyen el control territorial, la administración de justicia para los responsables de las vulneraciones y la eliminación de cualquier propaganda alusiva a organizaciones armadas en el territorio.

La Oficina reiteró la condena a estos ataques y recordó al Estado su obligación de proteger y garantizar los derechos humanos de todas las personas, especialmente de los pueblos indígenas. En este sentido, ha llamado al Gobierno a implementar estrategias efectivas para prevenir y proteger a estos pueblos de futuras vulneraciones.

Asimismo, la ONU insta al Estado a fortalecer los sistemas propios de gobierno, justicia y economía-ambiente de los pueblos indígenas mediante un mecanismo permanente de sostenibilidad financiera y asesoría técnica. Esto no solo protegería a las comunidades afectadas, sino que también fortalecería el Estado de Derecho y la gobernabilidad en las zonas afectadas por la violencia y el conflicto armado.

En cuanto a las acciones concretas, la Oficina destacó la importancia de planes de contingencia concertados con autoridades indígenas para prevenir y reaccionar ante posibles afectaciones futuras. Además, enfatizó en la necesidad de desmantelar lugares estratégicos en el país, como el Cauca, e instó a reforzar la coordinación interinstitucional a nivel nacional y territorial.

Por último, la Oficina de la ONU recordó a los grupos armados no estatales su obligación de respetar los derechos humanos y las normas del Derecho Internacional Humanitario en todo momento y lugar.