Editorial | El Nuevo Siglo
Las imágenes que a diario nos muestran la prensa de menores de edad capturados por infringir la ley se han vuelto, lamentablemente, una situación cada vez más frecuente y cotidiana. Incluso, la capacidad de sorpresa de la ciudadanía frente a lo que está pasando con los miles de niños y jóvenes que terminan en actitudes delincuenciales, es cada día menor.
En Colombia cada 24 horas se resuelven cien conflictos de manera dialogada. Esa cifra revelada días atrás por el Ministerio de Justicia merece ser ponderada porque pone de presente que la conciliación como método de justicia alternativa ya dejó de ser una mera formulación teórica o experimental y hoy por hoy es una realidad que se aplica día a día para dar salida a conflictos de bajo impacto entre los particulares.
La polémica está a la orden del día en la capital del país. En las últimas semanas han surgido toda clase de denuncias periodísticas en el Concejo distrital, los cotarros políticos y los propios entes de control e investigación a nivel capitalino y nacional, en torno a presuntas anomalías en la contratación de la administración de Gustavo Petro.
*El articulador de la paz
*Las reformas no dan espera
Muchas cosas se hablan sobre el Congreso y desde luego no es la entidad que tenga la mayor cantidad de credibilidad y respetabilidad entre los colombianos. De hecho, unos eran los parlamentarios que coparon la tribuna pública hace varias décadas, inclusive en épocas sin parangón, y otros los que hoy ocupan los escaños.
Sigue la violencia en la Franja de Gaza, mortandad que nos recuerda que desde los tiempos bíblicos las tensiones y roces  entre árabes e israelitas  han derivado repetidas veces  en sangrientas guerras. Israel, en algunas áreas del desarrollo y el armamentismo, es una potencia regional. Al parecer, cuenta con la bomba atómica que, como es obvio, no podría utilizar contra los palestinos en su propio territorio ni en Gaza, en donde cae una lluvia de bombas a diario.
Ni alarmismo como tampoco despreocupación. Ese puede ser el mejor lema a la hora de hablar de cómo debe reaccionar el país ante la posibilidad de que se detecten casos de Chikungunya, un virus que es transmitido por la picadura del mosquito Aedes aegypti infectado, el mismo vector del dengue, una enfermedad que se presenta en Colombia y en otras naciones más del continente americano.
El arranque en forma de la discusión en la Mesa de Negociación entre el Gobierno y las Farc sobre el tema de las víctimas del conflicto armado impone, de entrada, varios retos en los que será necesario aplicarse a la metodología ya probada en un año y medio largo de tratativas. Metodología que dio resultados, pues ya hay acuerdos parciales sobre los puntos de desarrollo rural, participación política y narcotráfico, restando, entonces, los de víctimas y terminación del conflicto.