EL PASADO fin de semana se produjo la mayor operación militar en lo que va de este Gobierno contra los grupos armados al margen de la ley, con el ingreso a gran escala del Ejército al corregimiento El Plateado, del municipio de Argelia, Cauca, para retomar este territorio que durante años se hicieron fuertes las disidencias de las Farc al mando de alias ‘Iván Mordisco’. Expertos consultados por EL NUEVO SIGLO consideran que hay otros enclaves de las guerrillas o grupos multicrimen en distintas regiones en donde es necesario una acción similar.

Kenneth Burbano Villamarín, decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Libre de Bogotá y conocedor del tema conflicto armado y paz, considera “que los aspectos a tener en cuenta son especialmente tres. Primero: la aplicación estricta del Derecho Internacional Humanitario, que obliga a la protección de la población civil ante los combates que se adelanten en los territorios; es decir la aplicación del principio de distinción”.

En segundo lugar, “no hay territorios vedados para la acción del Estado por medio de la Fuerza Pública, donde operen los grupos armados o las organizaciones criminales. Tercero, siempre será mejor el diálogo y los acuerdos de paz, pero si no hay voluntad de las organizaciones armadas, el Gobierno tiene la obligación de restablecer el orden público y proteger a las personas ante las atrocidades de la guerra y la acción de los delincuentes. Si el Gobierno actúa con voluntad política y decisión, con apego al DIH, se puede contrarrestar a los criminales”.

Por su parte, Jorge Restrepo, académico de la Universidad Javeriana y director del Cerac (Centro de Recursos para el Análisis del Conflicto), indicó: “Hay varios lugares en Colombia donde hay enclaves que tienen un dominio de algunos grupos armados. En muchos de esos enclaves hay disputas, pero además de este muy largo cañón del Micay y el valle donde está Argelia y sus corregimientos, hay otros que son muy importantes. Uno es el cañón de las Garrapatas que comunica el norte del Valle del Cauca y el Eje Cafetero con el Chocó y con el Pacífico”.

Agregó que otros son los diferentes ríos, estuarios, “que están en el Pacífico, tanto alrededor de Timbiquí, como de Guapi (en Cauca), como en el departamento de Nariño. Hay varios estuarios que tienen esa característica de que, si bien no son cañones profundos, muchos de ellos tienen varios grupos armados que dominan la salida de esos estuarios para el tráfico de narcóticos”.

Está también el cañón del Atrato, el río San Juan, “donde también hay dificultades, ambos en Chocó, hasta Antioquia", explicó el académico. Expuso además que hay diferentes cañones y valles en el Putumayo, y también algunos que comunican el piedemonte llanero, tanto con el departamento del Huila como con el Caquetá, y algunos en Casanare, Arauca y Norte de Santander.

“También hay zonas en la Sierra Nevada de Santa Marta, tanto en el Cesar como en el Magdalena, como en La Guajira, y algunas regiones del sur de Bolívar, en particular en la serranía de San Lucas, y en Córdoba en la serranía de Ayapel, donde hay zonas que requieren probablemente acciones de la Fuerza Pública que permitan evitar ese dominio que hay en muchos de esos sitios y que dan lugar a las disputas entre grupos armados”, concluyó Restrepo.

“Se necesita Fuerza Aérea”

El brigadier general (r) de la Policía, Luis Mendieta, dijo que "hay muchos sectores del país donde se necesita que llegue la presencia especialmente de la Fuerza Pública, porque vean el Chocó, el Caquetá como está, el mismo Arauca, el Putumayo. Entonces son departamentos donde la presencia de los grupos armados organizados se ha ido fortaleciendo durante los dos últimos años, y allí se necesita es que haya una operación tanto del Gobierno con autoridades civiles, judiciales y la Fuerza Pública, pero con acciones contundentes”.

Mendieta se lamentó porque dijo que infortunadamente está paralizada la actividad de la Fuerza Aérea, “y siempre para combatir a estos grupos irregulares se necesita el avión fantasma para estar haciendo la operación de apoyo al personal que va por tierra. Mientras eso no ocurra, pienso que ingresan, pero inmediatamente los grupos armados organizados se repliegan y a lo que salga la Fuerza Pública, pues nuevamente entran a controlar las zonas y especialmente a amedrentar a la población civil”.

La política de paz total del presidente Petro ha buscado prevalecer el diálogo con las organizaciones armadas ilegales para que se disuelven, por ello la operación del Ejército en El Plateado marcaría un punto de quiebre en esa intención, y es lo que varios sectores en el país le vienen exigiendo al mandatario, mano dura con los grupos delincuenciales que insisten en el accionar terrorista, como la Carlos Patiño de las disidencias en el Cauca.

Al respecto el brigadier general (r) Mendieta dijo que los grupos armados en las mesas de diálogo con el Gobierno en muchas ocasiones intentan “justificar la guerra buscando la paz: entre más acciones ofensivas hagan entonces según ellos más se cede y más rápido se obtiene la paz”.

Agregó que la lógica desde el Estado debe ser diferente, “porque para buscar la paz hay que buscar que los grupos armados organizados, si bien sea un cese al fuego, pero también que cesen totalmente las hostilidades y las acciones armadas. Mientras eso no ocurra, pues no puede haber paz. Entonces en este momento pensaría que las dos cosas como lo está haciendo el Gobierno trata de combinarlas, pero desde mi punto de vista si no hay una acción contundente y efectiva de la Fuerza Pública, pues no se puede consolidar la paz en las diferentes regiones”.

Velasco: hay que usar bombardeos

Para el general (r) Héctor Fabio Velasco, quien fue comandante de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), dijo que además de El Plateado el Ejército debe entrar a otros enclaves de los grupos armados ilegales que hay en diferentes regiones del país, “pero lo más importante no es eso, por experiencia le digo que lo único que le temen los guerrilleros es a las bombas. Cuando ellos saben que no pueden dormir más de dos noches en un sitio, tienden a abandonar el país”.

Agregó Velasco que el presidente ha dicho que si garantizan que no hay menores de edad en los campamentos de los grupos armados autoriza los bombardeos; sin embargo, indicó el excomandante de la FAC que “me extraña mucho, no he visto la primera denuncia del presidente ante las Naciones Unidas” por el reclutamiento de niños y adolescentes.

Enfatizó el general (r) que “no es solamente El Plateado, vamos a ir cerca de Corinto, es todo el país, y esto crece cada vez más. De manera que mientras él no autorice usar las armas de la República para defender la soberanía y defender el país, no estamos en nada”.