“No concertación del Estatuto de Oposición también es culpa del Polo” | El Nuevo Siglo
Miércoles, 16 de Noviembre de 2011

 

Una gran culpa en la decisión del Gobierno de no seguir concertando el proyecto de Estatuto de Oposición la tiene el propio Polo Democrático, según el senador de esa colectividad Luis Carlos Avellaneda. 
 
El congresista relató en qué temas hubo consensos y cuáles faltaron por concluir.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo tomó la posición del Gobierno de no concertar más con el Polo Democrático el proyecto de Estatuto de Oposición?
LUIS CARLOS AVELLANEDA: La Constitución de 1991 cambió el concepto de democracia representativa por un concepto de democracia participativa, lo que significa que las personas interesadas en un determinado asunto deberían tener participación en la definición de las políticas públicas atinentes a esas definiciones. Por tanto, se me hace extraño que el Ministro del Interior diga que no quiere esa concertación, porque es del espíritu de la Constitución de 1991.
ENS: ¿Esa situación es solo responsabilidad del Ejecutivo?
LCA: Tengo que decir que mi Partido tiene en gran parte la culpa en este tema, porque el Gobierno del presidente Santos, desde su comienzo, tuvo la gentileza de indicarle al ministro del Interior Germán Vargas Lleras que nos visitara en la sede del Polo Democrático. El Ministro nos dijo dos cosas relevantes. La primera, que este Gobierno respetaría al Polo Democrático como oposición, y segundo, que quería que se concertara un proyecto de ley para establecer el Estatuto de Oposición en Colombia. Respecto de lo primero, yo creo que en verdad el Gobierno ha respetado esa decisión de rodear a la oposición de algunas garantías.
ENS: ¿Cómo venía la discusión del Estatuto de Oposición?
LCA: Yo fui designado por mi Partido para empezar a discutirlo con el Gobierno, y la verdad adelantamos muchísimo. Diría yo que lo teníamos adelantado en un 90 por ciento, aunque faltaban algunos temas, entre los cuales recuerdo el tema de quién debería ejercer el control fiscal y disciplinario, para efectos de, desde nuestra oposición, ejercer el control verdadero, y no lo que ha ocurrido en varias ocasiones, donde el jefe de Gobierno es capaz de imponer quién va a ser el próximo Procurador y Contralor. No me estoy refiriendo ni al Procurador actual, ni a la Contralora, de quienes he visto un buen ejercicio funcional. Nosotros creíamos que eso debe quedar en gente que no fuera de los Partidos de gobierno, sino que debería quedar más o menos en manos de la oposición, aunque a través de un concurso. Ese fue un punto que no logramos decidir. De otro lado, sabiendo que los Partidos de oposición son muy débiles, estábamos buscando una mejor financiación.
ENS: ¿Qué pasó entonces?
LCA: Mi Partido decidió en un momento determinado suspender las conversaciones con el Gobierno acerca del Estatuto de Oposición y luego el Partido no reanudó esas conversaciones, y yo mismo, viendo la desidia de la Dirección de mi Partido, tuve que renunciar a la delegación que me habían hecho para discutir con el Gobierno ese Estatuto de la Oposición.
ENS: ¿Qué lograron concertar con el Gobierno en ese Estatuto?
LCA: Hemos discutido muchas cosas, entre ellas la actuación de los parlamentarios en la bancada, para que tuviéramos posibilidad de incidir en el orden del día y de privilegiar el trámite de algunos proyectos de ley, para que ciertos proyectos de ley fueran consultados previamente con la oposición, como el tema del Presupuesto, temas atinentes al de la soberanía. Habíamos logrado concertar también el derecho a la réplica, eso lo habíamos avanzado mucho, porque, sobre todo en el Gobierno del ex presidente Uribe, mi Partido fue objeto de muchos vejámenes y nunca tuvimos los mecanismos eficaces para poderle replicar al Presidente de la República. Esa experiencia ha hecho que nosotros debamos verificar muy bien los espacios para poder visibilizar la oposición.