Si llegara a concretarse la resurrección política de la exsenadora Piedad Córdoba, su nombre entraría a competir como posible candidata del movimiento político que surja de unas Farc desmovilizadas, ya sea en elecciones abiertas o dentro de un eventual listado que se le pida a esa organización- ya desarmada- para asumir curules automáticas en el Congreso. Por lo menos así lo ven varios analistas que han indagado todo el panorama político que se derive de un eventual proceso de paz. Hasta el momento solo se mencionaba el nombre de Álvaro Leyva como posible integrante civil de un proyecto político de esa guerrilla cuando esté desmovilizada, aunque el exministro siempre ha dicho que su único interés es ser facilitador de una salida negociada al conflicto armado interno.
Con platica…
Un Gobernador le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que le preguntó sobre por qué algunos alcaldes no habían puesto mucho peros a que en su jurisdicciones municipales se instalaran zonas veredales o campamentarias para la concentración de los guerrilleros de las Farc, que la razón de esa disponibilidad local fue que el Gobierno cuando habló con esos mandatarios les dijo que habría un plan presupuestal muy importante y excepcional para todas las poblaciones que estuvieran involucradas en este proceso. “Es por esa razón es que muchos alcaldes terminaron diciendo que sí, incluso sin consultar antes a sus concejos y gobernados, basados en la esperanza de que esos recursos adicionales les ayuden a superar muchas problemáticas que tienen en sus municipios pero que no pueden solucionar porque no tienen ni un peso para inversión social.”
De aquello, nada…
En la zona de frontera con Venezuela se alcanzó a pensar que la presencia del presidente Nicolás Maduro en el acto del proceso de paz colombiano, la semana pasada en Cuba, podría llegar a ser un síntoma de que las relaciones entre ambos gobiernos se distensionaban una vez más y, por esa vía, se podría vislumbrar la posibilidad de que Caracas ordene reabrir los pasos fronterizos cerrados desde julio y agosto del año pasado. Sin embargo del tema no se habló absolutamente nada ni en La Habana como tampoco en otras instancias en donde se han encontrado embajadores y cancilleres de ambos países, por lo que el bloqueo se mantiene igual que meses atrás.
¿Dos billones?
El uribismo está recabando información sobre las fuentes presupuestales a la que está acudiendo el Gobierno para financiar la ofensiva publicitaria que está desplegando en medios de prensa, radio, televisión, web, camisetas, pancartas, afiches, gorras y, en fin, en toda ventana que le permita llamar a respaldar el proceso y la votación positiva a un eventual plebiscito por la paz. Según le dijo a un parlamentario del Centro Democrático a un periodista de EL NUEVO SIGLO, “…podemos estar hablando de dos billones de pesos en menos de año y medio, que es el equivalente al apretón presupuestal que el mismo Gobierno ordenó a todas las entidades estatales alegando el hueco fiscal dejado por la crisis en los precios de los hidrocarburos”.