Sobre el futuro político del ministro de la Vivienda, Germán Vargas Lleras, se han tejido una cantidad de hipótesis, todas, en el papel, válidas, según el marco circunstancial en que se ubiquen. Y, como era apenas obvio, el avispero de especulaciones se alborotó tras las palabras del presidente Santos el lunes en la tarde durante la inauguración de la sede de la cartera que hoy dirige el fundador de Cambio Radical. “…Vamos a tener que sentarnos, doctor Germán, a discutir nuestro futuro ¿Vamos por los votos? ¿Vamos a seguir restaurando ministerios? ¿Vamos a seguir construyendo casas? Esa es una decisión que tenemos que tomar muy pronto, en un futuro cercano”, le dijo el Jefe de Estado a Vargas.
Hipótesis I
La primera cábala sobre el futuro de Vargas Lleras, quien ya fue candidato presidencial en 2010, cuando sumó casi 1,5 millones de votos, es la posibilidad de que aspire a suceder a Santos en la Casa de Nariño. Aunque hoy el Presidente dijo que antes de terminar el primer semestre revelaría si buscará o no la reelección, es claro que si Vargas Lleras renuncia antes de mayo -para no inhabilitarse- y Santos hasta esa fecha no ha definido si apostará por un segundo mandato, prácticamente se estaría dando el banderazo para la campaña del hoy Ministro.
Hipótesis II
También están quienes consideran que Vargas podría dar un paso al costado antes de mayo pero no necesariamente lo haría para candidatizarse a la Presidencia sino para pensar en una posible fórmula vicepresidencial, obviamente de un Santos en pos de la reelección. Como se sabe, el hoy segundo a bordo ya advirtió que en 2014 no será fórmula vice “de nadie”. Pese a que el Jefe de Estado es de La U y Vargas de Cambio Radical, hay conceptos jurídicos -que otros replican- en torno de que si el candidato-presidente es inscrito por varios partidos (bajo la figura de aval multipartidista) entonces su fórmula vicepresidencial no necesariamente tendría que ser de La U, sino de las colectividades que lo respaldaron.
Hipótesis III
Se refiere a que Vargas Lleras tendría que renunciar en la tercera semana de febrero para no inhabilitarse y ser cabeza de lista al Senado en 2014, puesto que es necesario contrarrestar la fuerza política de una posible lista uribista encabezada por el propio expresidente . Obviamente, al estar cerrada la posibilidad de ‘trastearse’ de partido (es decir, pasar a La U), esa aspiración del hoy Ministro tendría que hacerse a nombre de Cambio o -se especula- de la misma persona jurídica (basada en un movimiento político nuevo respaldado en firmas) que avale la candidatura de Santos. Sin embargo, una reciente jurisprudencia de la Corte Constitucional sobre los nuevos alcances de aplicación del castigo a la doble militancia, sería una cortapisa para esta opción.
Hipótesis IV
Para algunos analistas podría ser la más cercana a la realidad, bajo la tesis de que Santos irá por la reelección y La U no le perdonaría que el segundo a bordo saliera de otra colectividad, además de los impedimentos jurídicos ya mencionados. Además, Vargas ya dijo tiempo atrás que su ciclo en el Congreso estaba cumplido. En ese orden de ideas, se especula que Vargas renunciaría en los próximos meses pero para asumir como jefe de debate de la campaña reeleccionista, enfrentar, como peso pesado que es, a los uribistas y aplazar sus aspiraciones a la Casa de Nariño para 2018.