La bancada parlamentaria antioqueña adelanta contactos para solicitar una reunión urgente con el presidente Juan Manuel Santos en la que le reclamarán por lo que consideran señales ‘inamistosas’ de entidades gubernamentales o centralizadas hacia ese departamento. Harán especial énfasis en la sanción a EPM por el caso de Porce IV y los peros al proyecto de Autopistas de la Montaña. Se sabe, incluso, que algunos de ellos han buscado contactos con el expresidente Álvaro Uribe para que también haga “unidad de cuerpo” con la dirigencia paisa y eleve su voz de protesta. Hasta se ha hablado entre algunos senadores y representantes de pedirles a los ministros y altos funcionarios antioqueños del gobierno Santos que también hagan eco a los reclamos departamentales.
Cargos a la vista
Y hablando de ‘movidas regionales’, hay expectativa en la Costa Atlántica por lo que consideran una inminente entrada al gobierno Santos de varios de connotados líderes políticos, económicos y sociales de Atlántico, Bolívar, Magdalena y otros departamentos de la región. Se dice que Santos ya tiene listos dos nombramientos de dirigentes costeños, pues sabe que en la bancada parlamentaria de esa zona existe cierto inconformismo por su baja representación en los más altos cargos, incluyendo el propio gabinete. También se afirma que la Casa de Nariño ha insistido a los congresistas costeños que aceleren la creación de la región administrativa supradepartamental y los proyectos zonales a financiar bajo el nuevo esquema de inversión de regalías.
Bajo perfil
La llegada de Simón Gaviria a la jefatura única del liberalismo prácticamente llevó a que su padre, el expresidente César Gaviria, se haya auto-borrado del mapa político público de la colectividad. Algunos congresistas que han tratado de contactarse con el exmandatario y pedirle luces sobre temas como la expectativa de reelección y otros asuntos atinentes al liberalismo, se han encontrado con que Gaviria se lo pasa en el exterior y cuando está en el país evita al máximo la exposición en eventos políticos.
Por ahora no…
Una alta fuente gubernamental indicó el domingo pasado que la posibilidad de ‘meterle mano’ a la autonomía del Banco de la República no está en la agenda inmediata del Ejecutivo, pese a que varias voces de la Unidad Nacional ya lo han insinuado. Sin embargo, indicó que tras los reclamos ministeriales por el efecto del alza en las tasas de interés y el eco de los gremios a la insatisfacción, se espera que la junta del Emisor reflexione sobre la necesidad de cambiar en el corto plazo sus políticas de control macroeconómico y que empiece a ver más de cerca lo que hacen otros bancos centrales como los de Perú y Chile, que son más activos en sus intervenciones del mercado de capitales e índices básicos, y ostentan a la par las mayores tasas del crecimiento del PIB.
Sin progreso
La posibilidad de que el movimiento Progresistas, bajo cuyas banderas Gustavo Petro llegó a la Alcaldía de Bogotá, pueda ‘reclutar’ algunos dirigentes que antes militaron en el liberalismo, conservatismo y otras tendencias políticas de centro o centro derecha se complica cada día más. Dos serían las razones. Primero, que la idea inicial de arrancar un proceso de expansión nacional de Progresistas todavía sigue en el papel. Y dos, que así como pasó con el Polo en su momento, parece que se empieza a avizorar un pulso entre tendencias de izquierda democrática y una más centrista.