Más allá de que ayer se decidió, tras la reunión del Directorio Nacional, seguir insistiéndole a varios precandidatos que hoy se están lanzando por firmas que analicen la posibilidad de postularse a nombre del conservatismo, lo cierto es que crecen las voces en esa colectividad que consideran que debería empezarse a  analizar seriamente la posibilidad de no presentar candidato presidencial propio para los comicios de 2018. Sin embargo, ello no implicaría dejar de elegir  un aspirante único, ya que ello le permitirá al conservatismo tener “el poder de negociación” de cara a integrar una coalición multipartidista antes de la primera vuelta presidencial.

La estrategia azul (II)

Un senador de las toldas azules le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que “… lo único que no puede hacer el conservatismo es renunciar de manera anticipada a tener candidato presidencial” pues el partido de La U así lo hizo semanas atrás y desde entonces la crisis en esa facción política ha aumentado  de manera sustancial, al punto que hoy tiene en vilo su propia viabilidad electoral. “… El conservatismo debe apuntar a la consulta interpartidista de marzo, en lugar de ir directo a la primera vuelta, porque hoy no hay con quién”, sostuvo el parlamentario.

Condicionarían a candidatos por firmas (I)

El proyecto de reforma política electoral, que debe ser abordado por la plenaria de la Cámara la próxima semana, podría sufrir un nuevo cambio ya que algunos senadores están pensando en redactar un artículo para poner condiciones exigentes a los candidatos a cuerpos colegiados y cargos uninominales que deciden lanzarse bajo el respaldo de firmas y movimientos significativos de ciudadanos. Una de esas condiciones, según conoció EL NUEVO SIGLO, estaría dirigida a que se ampliaría a dos años el plazo el plazo para que una persona, ya sea dirigente o militante de un partido, renuncie al mismo. 

Condicionarían a candidatos por firmas (II)

“… Lo que estamos analizando es una medida legal o constitucional que impida que una persona pueda renunciar a un partido en las puertas de la Registraduría Nacional y minutos después entrar a inscribir un comité promotor de firmas… Si una persona, por x o y razón tiene en mente apartarse de una colectividad y lanzarse por firmas, debe haber renunciado a la misma dos años antes, sin que ello implique que deba anunciar sus intenciones futuras … De esta forma se garantiza el espíritu de la norma de los movimientos significativos de ciudadanos que no es, como están diciendo, una figura exclusiva para candidatos alternativos sino para a aquellos que quieren plantear sus ideas y sus propuestas por fuera de las colectividades vigentes…”, indicó uno de los senadores que está estudiando el borrador de un artículo en este sentido, aunque aún no se ha definido si se presenta como parte de la reforma política  o como un proyecto independiente y ajeno al ‘fast track’.

Una escogencia cantada…

Tras la confirmación ayer de que la senadora Claudia López será la candidata presidencial de la Alianza  Verde, un senador de La U dijo que “tan censurable” es que algunos candidatos presidenciales estén utilizando la táctica de la recolección de firmas para “poder hacer campaña disfrazada y tempranera”, como  que los verdes se hayan “inventado el tema de la encuesta” entre la congresista y el senador Antonio Navarro, cuando para todo el país político era absolutamente claro que desde hacía mucho tiempo está definido que López sería la candidata y que el parlamentario encabezara la lista al Senado.