En la Casa de Nariño se están cuestionando si la estrategia comunicacional está dando los resultados esperados, no solo porque la imagen presidencial y la calificación de la gestión así como del gabinete continúan en números rojos, al tenor de la mayoría de las encuestas, sino porque las propias mediciones internas del Ejecutivo señalan que la opinión pública no tiene el suficiente conocimiento de las ejecutorias del mandato Duque en estos escasos nueve meses. Por lo mismo, no sería de extrañar que en algunas semanas la estrategia de comunicación del Gobierno comience a cambiar en pos de un mayor impacto sobre la ciudadanía. Se sabe, incluso, que desde el Centro Democrático se le ha urgido a los principales asesores presidenciales que acepten que no está calando el plan de medios y redes sociales, lo que ha contribuido a que en algunos sectores se considere que hay debilidad o inexperiencia en la capacidad de mando del presidente Duque.
“Proyectos zombi”
Ese fue el término con que un alto cargo de una de las comisiones del Congreso llamó a varias iniciativas de ley y reforma constitucional que están cursando en Senado y Cámara sin que haya posibilidad real alguna de ser aprobadas en las siete semanas de trabajo legislativo que restan para que acabe esta primera legislatura, a mediados de junio. “…Son proyectos zombi porque siguen andando pero no saben que están muertos”, precisó la fuente consultada. Calendario en mano señaló que mediando el tema de las objeciones y los proyectos que ya tienen mensaje de urgencia, y siendo drásticos en los días que deben pasar para que un proyecto aprobado sea asumido por una comisión o una plenaria, a varias iniciativas importantes hay que aplicarles “la eutanasia” y no seguir perdiendo tiempo con ellas, para concentrarse mejor en un reducido número de proyectos que deben ser puestos como prioridad partidista y gubernamental.
¿Se moverá Duque?
Paradójicamente desde antes del receso de la Semana Santa varios senadores sabían que varias iniciativas no tienen cómo ser aprobadas y así se lo habrían informado ya a varios ministros que, a decir verdad, no les creyeron. Por el contrario, en el alto gobierno se considera que hay tiempo, apretado eso sí, para salvar gran parte de la agenda legislativa y por eso la orden en este mes y medio a todos los ministros y altos funcionarios será de la priorizar su asistencia al Congreso. Por el momento no hay confirmación de una nueva ronda de reuniones del presidente Duque con las bancadas, como ocurrió a comienzos de febrero pasado, cuando hubo una rebelión partidista porque se acusó al Ejecutivo de solo priorizar su agenda y no la de origen parlamentario. Se ordenó, entonces, organizar unas “mesas técnicas” para analizar los proyectos de cada colectividad pero estas no fructificaron mucho.
“Fecha de caducidad”
Para algunos parlamentarios parecería claro que por lo menos tres o cuatro ministros a duras penas llegarán al primer año de gobierno, e incluso se especula que darían un paso al costado una vez termine la actual legislatura, que va hasta mediados de junio, aunque no se descarta que haya necesidad de citar a una o dos semanas de sesiones extras dado lo colgada que va la agenda legislativa. Es más, un veterano parlamentario les dijo a varios reporteros políticos antes del receso de la Semana Santa que varios ministros de Duque vienen con “fecha de caducidad” y que aunque el Jefe de Estado no quiere dar ‘la papaya’ de relevarlos, por lo menos dos ya le habrían insistido en que presentarán renuncia irrevocable a sus cargos en las próximas semanas.