Más de 400 personas de la Iglesia Adventista del Séptimo Día ayudaron a reverdecer un tramo de esta emblemática calle bogotana con la plantación de 100 nuevos árboles.
Niños, niñas, jóvenes y adultos de esta comunidad cristiana apadrinaron estos árboles y se comprometieron a cuidarlos. Los visitarán frecuentemente para regarlos y darles su cariño.
Este año, el Jardín Botánico de Bogotá (JBB) tiene como meta plantar cerca de 2.300 árboles en el separador central de la Calle 26 comprendido entre la Avenida Ciudad de Cali y la Carrera 30.
Desde las siete de la mañana, cientos de bogotanos se apoderaron de dos carriles de la emblemática Calle 26 para cumplir su cita dominguera con el deporte. Unos caminaban con sus mascotas, otros trotaban a pasos galopantes y la mayoría montaba bicicleta.
Al pasar por la carrera 50, algunos deportistas detuvieron su marcha por la Ciclovía para observar un tramo del separador central de la avenida ubicado al frente de la Embajada de los Estados Unidos, donde varios huecos de un metro de profundidad llamaron su atención.
Árboles de bajo porte con sus raíces protegidas en bolsas plásticas negras, largos palos delgados de madera, carretillas, baldes, palas y azadones, también decoraban el lugar. El sitio estaba vigilado por cinco personas con uniformes de color verde oscuro.
Mientras tanto, más de 400 personas de la Iglesia Adventista del Séptimo Día llegaban en vehículos, bicicletas o a pie al frente de la Gobernación de Cundinamarca, todos vestidos con ropa cómoda y colorida que exhibía varios mensajes religiosos.
La comunidad cristiana fue recibida por cinco profesionales del grupo social de la Subdirección Técnica y Operativa del Jardín Botánico de Bogotá (JBB), quienes se encargarían de conducirlos hacia el separador de la carrera 50 para reverdecerlo con nuevos árboles.
“Hoy vamos a plantar 100 árboles en este corredor de la Calle 26, donde nuestros operarios ya abrieron los huecos y dejaron la tierra lista. La Iglesia Adventista del Séptimo Día es una de las manos amigas que se han sumado al reverdecer de este corredor vial”, dijo uno de los profesionales.
Hacia las nueve de la mañana, bajo un cielo con pocas nubes y un sol que se tornaba cada vez más intenso, los 400 niños, niñas, jóvenes y adultos de la comunidad cristiana atravesaron la Calle 26 y caminaron por el separador central hasta llegar al frente de la plantación.
Los ingenieros del Jardín Botánico los dividieron en cinco grupos y se encargaron de darles varias indicaciones técnicas, como retirar la bolsa plástica del árbol con mucho cuidado, observar si el hueco cuenta con la profundidad necesaria y la aplicación de un hidroretenedor que le brindará humedad al individuo arbóreo.
Leonel Preciado Cárdenas, pastor y director de jóvenes a nivel nacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, tomó un micrófono que estaba conectado a un bafle pequeño y se dirigió a su comunidad cristiana.
“La plantación de estos árboles es una de las actividades que estamos realizando para celebrar los 100 años que cumple nuestra comunidad cristiana en Bogotá, una ciudad donde tenemos 190 iglesias”.
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Según Preciado, esta no es la primera vez que su iglesia participa en las actividades ambientales del Jardín Botánico. “Llevamos 10 años acompañando al JBB en sus plantaciones, una actividad que nos permite aportar nuestro granito de arena en el cuidado de la naturaleza”.
Las vestimentas de la comunidad cristiana, pintadas con la frase ‘Quiero vivir sano’, revelan su compromiso ambiental. “Esta es una marca registrada de nuestra iglesia que tiene varias líneas de trabajo, como un estilo de vida saludable y el cuidado de los recursos naturales”.
Luego de varias oraciones por parte de los pastores de la iglesia, los 400 ciudadanos se organizaron en sus grupos y empezaron a plantar los 100 árboles con ayuda de los profesionales y operarios del JBB.
En los tutores, palos de madera que les darán estabilidad a los árboles, los participantes escribieron sus nombres o frases religiosas. “Hoy apadrinamos cada uno de los árboles y nos comprometimos a visitarlos seguido para regalos y cuidarlos”, dijo Preciado.
Finalizada la plantación, los pastores de la iglesia volvieron a decir sus oraciones y aseguraron que su comunidad cristiana está muy interesada en seguir reverdeciendo la Calle 26 u otros sitios de la ciudad.
“Este año tenemos como meta plantar cerca de 2.300 árboles en el separador central de la Calle 26 comprendido entre la Avenida Ciudad de Cali y la Carrera 30. Esperamos contar con su apoyo y compromiso en las próximas jornadas”, le dijeron los profesionales del JBB a la comunidad cristiana.