PASAN LOS días y seguimos en casa. Son muchas las preguntas que pasan por nuestra cabeza, dado que la piel de la cara y del cuerpo se resiente. ¿Qué hacer durante estos días para no perder todo lo que se ha hecho en cabina?
Carmen Navarro brinda algunos pasos para que, a través de las rutinas de belleza en casa, cuidemos nuestra piel y cuerpo.
1. Para nuestro rostro es fundamental una rutina de belleza diaria: el mejor consejo es continuar con tus hábitos de cuidado en casa y dedicarles el tiempo que merecen. Es primordial la limpieza facial durante la mañana y la noche. Aunque no nos maquillemos y pensemos que no estamos expuestos a la contaminación o agresiones externas, nuestra piel necesita liberarse de toxinas, eliminar células muertas y regenerarse.
Salgas o no a la calle, te maquilles o no, tu cutis necesita que lo liberes de las impuresas que acumula a lo largo del día. No lo olvides, este no deja de trabajar. Por la noche, la piel se repara de las agresiones sufridas. Así es como se restaura y repara todos esos daños.
Por el día se encarga de protegernos y, en ambos casos, es fundamental que se encuentre en perfectas condiciones, que esté limpia de toxinas para que penetren los principios activos que vamos a aplicar a continuación.
2. Incorpora elementos que te ayudan y relajan: la lavanda. Con este excelente ingrediente, además, puedes aprovechar este tiempo de confinamiento e incorporar algún detalle a tu rutina de limpieza que la convierta en algo aún más placentero.
Prueba con añadir unas gotitas de esencia de lavanda a tu ritual. Hay varias maneras de hacerlo. Una de estas consiste en realizar tus ejercicios de yoga facial (algo que aconsejamos para potenciar los beneficios de los cosméticos y para luchar contra el envejecimiento) y utilizando previamente unas gotitas de lavanda como aromaterapia.
También, se puede realizar añadiendo un poco de esncia en un bol de agua templada y mojar la toalla de algodón que usamos para retirar la leche limpiadora. Notarás pronto sus beneficios porque la lavanda es capaz de aportar desde hidratación hasta nutrientes, tonificar, estimular y en general, mejorar el aspecto de nuestra piel.
3. Practica yoga facial frente al espejo: resulta ideal para trabajar las arrugas y la flacidez. Te ponemos un ejemplo para combatir la papada y definir el óvalo facial.
La papada es una de las zonas que más nos preocupa y envejece. Intenta agarrar con una mano abierta la mandíbula, manteniendo el dedo pulgar y el dedo índice estirados. Aplica tensión mientras haces fuerza en esta zona, enviando ligeramente la barbilla hacia delante. No presiones con demasiada energía para evitar molestias en las cervicales. Pero no olvides que la higiene postural es clave. Una posición incorrecta frente al ordenador afecta de manera especial papada, cuello y escote.
Para mantenerla a raya, imagina que una cuerda te sostiene y te lleva hacia el techo. Evita también alimentos precocinados que contienen carbohidratos y azúcares refinados que aportan al envejecimiento y se acumulan en esta zona. Por la noche, aprovecha para emplear mascarillas con colágeno para tensar, así como de cafeína para reducir la grasa. Su diseño les permite actuar como un parche consiguiendo el efecto tensor que estamos buscando.
4. Exfoliar desde casa para el rejuvenecimiento: para el rostro, el azúcar es un gran aliado, solo tienes que mezclar dos cucharadas de grano fino con una de aceite de oliva hasta formar una pasta y masajear sobre el cutis húmedo, retira con agua tibia y utiliza a continuación el sérum o la crema habitual. No olvides que esta limpieza profunda es también un recurso que además de retirar las células muertas, ayuda a eliminar impurezas, purificar y reducir el tamaño de los poros, luchar contra las manchas y pequeñas arrugas, así como combatir los efectos de la contaminación ambiental, además de estimular la microcirculación sanguínea que potencia el mejor funcionamiento del tejido epidérmico.
5. Ampollas de soja para combatir signos de fatiga y recuperar la luz en tu piel: ¿El motivo? La soja es rica en vitaminas y minerales, fuente de aminoácidos esenciales, deja la piel firme, elástica e hidratada, además, actúa como un potente antiarrugas. Es una cura de belleza absoluta ideal para estos días.
Para conseguir un lifting natural de impacto, hay que añadir a la soja los siguientes activos. Sacha Inchi: planta autóctona del Amazonas, rica en ácidos grasos insaturados, contiene Omega 3, 6 y 9, antioxidantes y aminoácidos; proteoglicanos marinos: aportan gran elasticidad y flexibilidad; y Vitamina C en forma estable y encapsulada: es como debe presentarse para ser realmente efectiva y cumplir su función antioxidante e iluminadora.