Con la finalidad de incentivar a los niños, niñas, docentes y comunidades a recuperar y restaurar áreas que han sido afectadas por la expansión agrícola y pecuaria en la población de Santa María, la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM) adelanta una estrategia que busca la creación de huertos escolares para el rescate de semillas de plantas vulnerables.
La estrategia práctica para la restauración ecológica mediante el rescate, recolección, germinación, trasplante y siembra de material vegetal, busca rescatar especies como el Cedro Negro y Rosado, así como Nogales.
“Inicialmente lo que se busca es la formación integral y permanente de los estudiantes con relación a la conservación, cuidado, protección de los recursos naturales y de aprender a convivir e incentivar a las comunidades a proteger y cuidar el medio ambiente que los rodea”, dio a conocer César Augusto Hernández Soto profesional de la CAM del Distrito Regional de Manejo Integrado Cerro Banderas Ojo Blanco, ecosistema que tiene su área de influencia en esta población.
En la actualidad, los estudiantes y docentes de la Institución educativa de San Joaquín, sedes Santa Librada y Carmen de Bolívar de Santa María, así como los niños y niñas que pertenecen al grupo de Guardianes del Bosque son quienes participan en esta estrategia adelantada por la CAM.
“El proceso del vivero de dos especies muy importantes como el Cedro Negro y Rosado, árboles en peligro de extinción, ha sido placentero porque con nuestros estudiantes recolectamos las semillas que son traídas desde los mismos hogares, le hacemos el proceso de germinación y luego plantamos los árboles”, contó Nancy Milena Romero Obando, docente de la Institución Educativa San Joaquín sede Santa Librada.
La profesora explicó que lo más destacado es que los niños y niñas continúan el proceso en sus comunidades preservando el medioambiente y entendiendo que viven en un ecosistema protegido del Huila.
- Le puede interesar: Colombia cuenta con una nueva especie de salamandra: la Bolitoglossa
Dos años
En este sentido el profesional de la CAM indicó que “desde hace más de dos años se viene adelantando el proyecto, primero con Cedro Negro y Cedro Rosado, con una eficiencia del 100 por ciento en el cedro rosado y una débil germinación en el cedro Negro, con solo cinco semillas germinadas de 50”, relató Hernández Soto, quien dio a conocer que durante la última actividad se sembraron 35 individuos de cedro rosado, cinco cedros negros y 10 nogales en el predio La Fortaleza de propiedad del municipio de Santa María, el cual fue adquirido para la conservación.
Además indicó que la meta es seguir el proceso rescatando especies endémicas y frutales para los animales silvestres que tengan allí sus ecosistemas.
“De manera articulada entre docentes, estudiantes y padres de familia se identifican áreas o puntos donde se llevará a cabo las actividades de recolección de semillas, frutos caídos, trasplante de plántulas que se encuentra en los suelos en las áreas de importancia ecosistémica, en especial de especies vulnerables o que cumplen una función importante en el ecosistema como alimento de aves y mamíferos de la zona”, explicó el profesional de la autoridad ambiental del Huila.
Replicar el proyecto
La idea según la CAM es replicar este proyecto en las diferentes instituciones educativas del área protegida de Cerro Bandera Ojo Blanco en los municipios de Teruel, Santa María, Palermo e Iquira.
“Me siento muy orgulloso por mis compañeros y por mí porque hemos logrado sembrar el Cedro Negro en un proceso que inició cuando fuimos a buscar la semilla, a sembrarla, pero antes hicimos varios experimentos con algodón y alcohol, en tierra y arena. Todo esto gracias a la CAM que nos enseñó y nosotros lo logramos”, aseguró Kevin Leonardo Oviedo Vargas, estudiante de la Institución Educativa San Joaquín sede Santa Librada.
Cerro Bandera Ojo Blanco
El Distrito Regional de Manejo Integrado Cerro Bandera Ojo Blanco es un área protegida del Huila, que abarca los municipios de Santa María, Palermo, Iquira y Teruel y cuenta con una extensión de 22.073 hectáreas, importante por ser fuente de riquezas naturales y de recursos hídricos, abastecedora de 32 acueductos, tres distritos de riego, que nutre el río Yaguará, Baché y Paéz, beneficiándose con ello 5.970 familias
“Es importante venir a sembrar estos árboles en esta área protegida porque esto viene acompañado del cuidado de los recursos naturales y del orgullo que nuestros hijos nos dan recogiendo semillas y sembrando plántulas de cedro negro y rosado, mejorando así nuestra calidad de vida”, afirmó Guerly Judith Torres, madre de familia de la vereda Santa Librada.