Sin duda este será un año duro económicamente para los hogares colombianos. La inflación cerró en diciembre del año pasado en 13,12%, la más alta en 21 años. Esto significa que el costo de vida cada vez crece más.

En este 2023 se espera un alza en el tema de los arriendos históricamente alta; además, el precio del transporte público subió en una mayor proporción.

Este es el verdadero problema para los hogares: la proporción en la que todo ha subido. Es normal que cada año se incrementen los precios de todo, ya sea por la inflación o porque hay elementos que crecen a la par que el salario mínimo, pero el desfase económico de este año radica en que las alzas han sido mucho más altas.

Por ejemplo, el pasaje de Transmilenio normalmente subía entre $50 y $100, pero este año el aumento fue cercano a los $300. La inflación ha hecho que todo sea más costoso y que el salario mínimo se vea insuficiente para todos los gastos que se vienen.

Los alimentos

El alto costo de los alimentos básicos de la canasta familiar también preocupa a las familias. Anteriormente las personas solían reemplazar la carne por el huevo, por ejemplo, pero ahora los huevos tienen un costo que para muchos es demasiado alto, la unidad puede estar hasta en $700; la leche, el pan, la papa y la carne también han subido de precio.

Ante este panorama, varios analistas sugieren que lo mejor durante este año es ahorrar y ser austeros, pero con el alto costo de vida parece que hacerlo no será nada fácil o al menos para la mayoría de colombianos, para quienes ahorrar es una utopía en estos tiempos.

Pero no es imposible, al menos se puede intentar no hacer muchos “gastos hormiga”, esos pequeños consumos que cuando se suman dan como resultado un gran capital.

La mayoría de estos no están dentro del presupuesto y en la mayoría de los casos pasan desapercibidos y se cree que no afectan en gran medida las finanzas personales. Sin embargo, a la larga pueden sumar una buena cantidad de dinero que se podría ahorrar.

¿Cuáles son los gastos hormiga?

El café que se compra todos los días, los antojos de la tienda como los postres o dulces para después del almuerzo, pequeños vicios como el cigarrillo, cualquier compra por impulso, suscripciones que se pagan y que muchas veces no se utilizan, una cerveza y los domicilios, son apenas algunos de esos pequeños gastos imperceptibles que restan dinero.

Por lo anterior es importante identificarlos, tomar conciencia de estos y llevar un control. Al ser desembolsos bajos en cosas cotidianas, pensamos que no tienen mayor repercusión en nuestro bolsillo y no les prestamos atención.

De acuerdo con expertos en finanzas personales, el problema no radica en que se gaste en este tipo de cosas, sino en no tener estos desembolsos dentro de un presupuesto, debido a que se tiene que sacar de otro rubro y de esta manera se deja un hueco en otras cosas que se deben pagar.

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Las compras

Por ejemplo, si usted compra un tinto diario que le cueste $1.000, seguramente no lo tomará como un gasto, y mucho menos estará dentro de su presupuesto, pero si decide repetir esta compra cinco días a la semana, serían $5.000, es decir, que al mes un tinto diario le representa $20.000. También están aquellos que son fumadores y compran cigarrillos diarios que oscilan entre $800 y $1.000 la unidad, otro gasto que pasa desapercibido.

Para Carlos Barrero, de 28 años, su “gasto hormiga”, son las suscripciones a plataformas de streaming que no usa casi nunca, como Disney o Amazon. “Tengo la suscripción por débito automático, así que ya no me doy cuenta cuando pago, pero en realidad casi nunca las uso, porque no tengo tiempo o porque prefiero otras plataformas, como Netflix por ejemplo”.

Por su parte Johana Quintero, de 25 años, asegura que normalmente no fuma, pero que cuando está estudiando en la universidad, consume uno o dos cigarrillos cada dos días. “Me considero una fumadora social. Solo lo hago cuando me tomo una cerveza con mis amigos o en las noches entre clases a veces fumo uno o dos cigarrillos, aunque no todos los días. Como no es una compra constante, no creo que sea un gasto significativo”, sostuvo.

Mientras que para Adriana Bonilla es infaltable el “mecato”, como ella lo llama, es decir, cualquier dulce o paquete entre el desayuno y el almuerzo, o entre el almuerzo y la hora de salida de su trabajo.

Todos estos son gastos que pueden evitarse o congelarse por un tiempo, dinero que se puede ahorrar si toma nota de estos y hace un presupuesto consiente de lo que puede gastar en este tipo de cosas.

Cuide sus finanzas

También hay otras recomendaciones que ayudan a cuidar sus finanzas y pueden contribuir para lograr ahorrar. En primer lugar, es importante cuidar el financiamiento con las tarjetas de crédito. La tasa de usura para créditos de consumo, que afecta las tasas de las tarjetas de crédito, se ubica en 41,46 % y es probable que aumente algo más en los próximos meses. Si es posible, evite financiarse a esas tasas y realice sus compras a una sola cuota.

Así mismo, los usuarios financieros pueden pensar refinanciar los créditos de consumo y consolidarlos. Las tasas de los créditos de consumo han venido en aumento, como resultado del incremento de tasas por parte del Banco de la República. Es probable que los tipos sigan al alza, así que es un buen momento para consolidar deudas y asegurarse tasas fijas para los próximos meses.

Por otra parte, es importante recordar que a partir del 1 de enero el IVA, que estaba en 4 % para servicios de alojamiento y turísticos, regresa al 15 % mientras en tiquetes aéreos el IVA subió del 5 % al 19 %. En este caso puede intentar aprovechar distintas promociones o vacacionar en temporada baja.

Otros analistas consideran que es un gran momento para aprovechar las tasas altas de los CDT. Cabe recordar que por cuenta de la subida de las tasas de interés del Banco de la República y de la regulación que afecta la liquidez, los bancos están ofreciendo tasas atractivas en CDT, que en un horizonte de 3 a 12 meses pueden ser un buen vehículo de inversión, mejor incluso que tener dólares en efectivo.

La tasa promedio de CDT a 6 meses está en 15,5 % y la de un año en 17,4 %. Si el apetito por riesgo es mayor, se prevé que 2023 puede ser un mejor año para las acciones.