Con la renuncia de Ingrid Betancourt ayer a participar en la coalición de Centro Esperanza pero quedando por su propia cuenta en la campaña presidencial, aumenta el número de candidatos que irán directo a la primera vuelta.
El último en tomar esa decisión había sido el aspirante del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, luego de sentir que le habían dado un portazo en la coalición Equipo por Colombia por cuenta de unas declaraciones del precandidato Alejandro Char a María Isabel Rueda, en una entrevista a El Tiempo. A pesar de que otros miembros de ese bloque, como el aspirante del conservatismo David Barguil y el exalcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, le pidieron a Zuluaga que reconsiderara su negativa, el candidato uribista mantuvo en firme su decisión.
Quedó pendiente, de igual manera, la invitación que hizo Gutiérrez al precandidato del Movimiento de Salvación Nacional, Enrique Gómez Martínez, para ingresar al bloque, sobre lo cual este dijo que podrían tomarse varios “tintos” al respecto e indicó que los acuerdos y el consenso se logran a partir de las discrepancias y alcanzando puntos de encuentro.
Al mismo tiempo, el precandidato de esa misma coalición Enrique Peñalosa fue avalado por el partido de La U, después de no conseguir el umbral mínimo para inscribirse por firmas. En el mismo sentido, el partido cristiano MIRA ingresó a este bloque con Aydeé Lizarazo como precandidata presidencial.
Así las cosas, el Equipo por Colombia se inscribió esta semana para las consultas interpartidistas del próximo 13 de marzo con los siguientes precandidatos: Char, Gutiérrez, Peñalosa, Lizarazo y Barguil, quien el mismo día fue proclamado en la convención conservadora.
En este último certamen, Barguil prometió recurrir al estado de excepción para reiniciar las fumigaciones aéreas con glifosato sobre los cultivos ilícitos, por considerarlo un tema de seguridad nacional, dejando de lado las consultas étnicas que ordenó recientemente la Corte Constitucional, a llevarse a cabo en el plazo de un año.
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En ese orden de ideas, hoy están decididos a ir a primera vuelta, sin la intermediación de las consultas, los ya mencionados Zuluaga, Gómez y Betancourt, así como los candidatos por firmas Rodolfo Hernández (exalcalde de Bucaramanga), Luis Pérez (exgobernador de Antioquia) y se está pendiente de la confirmación del candidato de Colombia Justa y Libres, John Milton Rodríguez.
Betancourt se separa
Como se dijo, Ingrid Betancourt se retiró ayer de la coalición Centro Esperanza, de la que hizo parte como precandidata en los últimos 15 días, tras considerar que se habían desconocido los acuerdos en torno a no aliarse con las “maquinarias políticas”.
Los nuevos movimientos en esta coalición se comenzaron a dar desde el martes pasado cuando en el debate organizado por El Tiempo y Semana, Betancourt criticó las adhesiones que acababa de recibir el precandidato Alejandro Gaviria, en cabeza del senador por Cambio Radical, Germán Varón Cotrino, y algunos dirigentes liberales.
Ante el reclamo, Gaviria le contestó en términos fuertes, acusándola de hipocresía y oportunismo. La aspirante dijo que no se trataba de ataques personales. No obstante, ese fue el detonante de la situación que ayer terminó con la salida de Betancourt de la coalición, tras haber recurrido a varios ultimátum.
Esto pese a que los otros miembros de la coalición (Sergio Fajardo, Juan Manuel Galán, Juan Fernando Cristo, Jorge Enrique Robledo y Carlos Amaya) habían emitido pocas horas antes un comunicado reiterando no podían aceptarse adhesiones de quienes hubieran respaldado al gobierno Duque o votaron en el Congreso cualquier iniciativa de la Casa de Nariño. Recordaron que en la declaración de principios, suscrita en noviembre del año pasado, también se reiteró que tampoco se admitían alianzas con sectores de “maquinarias políticas” o incursos en casos de corrupción.
En efecto, sostuvieron que “la aceptación de uno de los integrantes de apoyos por parte de dirigentes que han acompañado la agenda de gobierno del Presidente Duque, a la que nos oponemos con firmeza, es una equivocación que no compartimos y lamentamos. También fue desacertado ventilarla públicamente, sin discusión previa, como se había procedido en oportunidades anteriores”.
Agregaron que correspondía tanto a Betancourt como Gaviria decidir si continuaban en la coalición.
Paradójicamente, fuentes políticas consultadas por EL NUEVO SIGLO indicaron que maquinarias políticas hay en todas las coaliciones, incluida la propia Centro Esperanza que cuenta, por ejemplo, con la alcaldía de Bogotá, a nombre de la Alianza Verde.
Gaviria se queda
El primero en reaccionar a ese comunicado fue Gaviria, quien inicialmente dijo que creía “en la política que une, congrega, conversa con los distintos, busca soluciones y construye colectivamente en medio de la crisis. No creo en un centro político que se esconde, se aísla y le da la espalda al país”.
Luego el mismo precandidato celebró “que el documento (de los precandidatos) recoja mis criterios y observaciones. Comparto los principios. Los he cumplido y los cumpliré. Participaré en la consulta de la Coalición Centro Esperanza en marzo. Vamos a ganar”. Pero agregó que “no voy a renunciar bajo ninguna circunstancia a los apoyos recibidos”.
Pocas horas después se conoció la renuncia de Betancourt a la coalición y empezaron las reacciones de los otros precandidatos. Fajardo indicó que “las diferencias no se tramitan en público ni con ultimátum. En la Coalición de la Esperanza hemos perdido diez días y el país espera más de nosotros. Necesitamos seguir adelante resolviendo las preocupaciones de la gente”.
En cuanto a si Verde Oxígeno, el partido de Betancourt, estaba avalando su precandidatura, Fajardo indicó que “no he recibido ningún aval pero ese no es el problema, los grandes problemas son los del país. Por eso debemos mirar hacia adelante y trabajar para resolverlos”.
Entre tanto, Humberto de la Calle, cabeza de la lista al Senado de la coalición y quien fue avalado por Verde Oxígeno, está pendiente de qué va a pasar con su aspiración e incluso de nuevo insinuó su renuncia. Frente a ello, la misma Betancourt contestó que si bien ella se salía de la coalición su partido podía dejar en libertad a sus militantes para poder votar por el ex vicepresidente, manteniendo los avales para Senado y Cámara.
Al mismo tiempo, Galán sostuvo que se estaba “… dando un espectáculo, por decir lo menos, infantil”.
Por su parte, Amaya, también avalado por Verde Oxígeno, lamentó la salida de Betancourt pero dijo que seguía en la coalición y “en próximos días anunciaremos el paso a seguir”.
De tal modo la campaña queda con tres coaliciones que competirán el 13 de marzo para escoger su aspirante único así como varios candidatos de partido o por firmas que van directo a la primera de la vuelta del 29 de mayo, al contrario de lo que se pensaba cuando se creó el mecanismo de las coaliciones y las consultas interpartidistas.