Una evolución artística y nuevas donaciones de piezas protagonizarán “Somos+”, la exposición con la que el Museo de Arte Contemporáneo de Bogotá (MAC) abre su calendario de actividades.

La muestra se realizará a partir de este mes y hasta el 30 de abril. Durante este tiempo se llevarán a cabo visitas interpretadas, talleres educativos, entrevistas con los artistas y transmisiones temáticas en vivo.

Con el apoyo del Ministerio de Cultura, a través del programa ReactivARTE, el Museo extendió una invitación a 21 artistas que en su momento participaron en alguna de las versiones del proyecto “Tesis”, para conocer la evolución de su práctica artística a la luz de las circunstancias que vive el país, con especial énfasis en las demandas de los jóvenes frente a su presente y su futuro.

También es el momento propicio para exhibir las nuevas donaciones que han realizado los artistas a la colección del Museo en el último lustro.

“De todos es conocido que, en el campo de las artes, el camino inicial es mucho más arduo que en otras disciplinas; las perspectivas de trabajo remunerado, el reconocimiento profesional y el acceso a los espacios museales son casi una labor titánica y la gran mayoría es excluida. Precisamente, el Proyecto Tesis ha querido romper esta barrera apoyando a los recién graduados desde el inicio de su vida profesional, al validar su proyecto de grado como experiencia en su currículum”, señalaron los organizadores de la exposición.

Con esta muestra el Museo busca hacerse eco de las múltiples y diversas inquietudes expresadas por los jóvenes en sus demandas ante el gobierno, la sociedad, las universidades, las empresas y el sistema como forma de organización social.

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Inquietudes como la necesidad de su reconocimiento como actores sociales, la valoración de sus aportes, el respeto por sus orígenes, ideas y convicciones, su dignidad; pero también sus temores, la precariedad de las formas de contratación que atentan contra su presente y su futuro generando inseguridad, inestabilidad y angustia.

“También su alegría y su tristeza, sus enormes ganas de luchar, sus planteamientos para cambiar el mundo a partir de un ordenamiento social disidente que interroga la autoridad, el poder, la educación y el consumo”, comentaron.

Para el Museo “creer en los jóvenes es oxigenar la sociedad, es estar abiertos sin temor al cambio natural y permanente que está implícito en las nuevas generaciones”.