AUNQUE el comportamiento de la actividad del volcán Nevado del Ruiz este viernes fue muy similar a la de los días anteriores, dos de sus principales indicadores (fracturamiento de roca en su interior y energía sísmica liberada) registraron una leve reducción respecto al día inmediatamente anterior (jueves).

Así lo indicó el Servicio Geológico Colombiano (SGC) que advirtió que ello no quiere decir que haya disminuido la intensa actividad del volcán y que para poder bajar el nivel de alerta, que sigue en naranja, todos los indicadores deben marcar una tendencia a la baja durante varios días.

En el reporte de este sábado, indica esa entidad adscrita al Ministerio de Minas, que la actividad sísmica asociada a fracturamiento de roca dentro del edificio volcánico, una disminución en el número de sismos registrados y en la energía sísmica liberada, en comparación con el día anterior.

Agrega que la sismicidad estuvo localizada principalmente en el cráter Arenas y en el sector oriente-nororiente, a una distancia máxima de 4 km a partir de este. Las profundidades de los sismos oscilaron entre 1 y 6 km.

Con corte al monitoreo este sábado a las 08:30 a.m., “esta sismicidad ha estado localizado en el sector suroriental y la magnitud máxima registrada hasta el momento ha sido de 1,6, correspondiente al sismo registrado a las 03:09 a.m., localizado a 2,0 km al suroriente del cráter Arenas y a 3,5 km de profundidad”, reseña.

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De igual forma que ha predominado la actividad sísmica relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos, muy similar a la del jueves, y que estas señales han sido relacionadas con emisiones pulsátiles de ceniza, confirmadas a través de las cámaras web utilizadas para el monitoreo volcánico.

Respecto a las variaciones en la desgasificación de dióxido de azufre, las cuales han mostrado un leve aumento en los últimos días, y la salida de vapor de agua a la atmósfera desde el cráter continúan y el viernes la altura máxima de la columna de gases y/o ceniza observada ayer fue de 1200 m medidos desde la cima del volcán.

La columna tuvo una dirección de dispersión hacia el sector noroccidental del volcán, cubriendo de cenizas las localidades allí asentadas.

Insiste el Servicio Geológico Colombiano que los habitantes de las zonas aledañas al volcán nevado del Ruiz no deben acostumbrarse a estos cambios oscilatorios de actividad y considerarla normal. Por el contrario, deben permanecer atentos e informados, a través de las vías establecidas, sobre el comportamiento del mismo para actuar en caso de que la alerta cambie a roja, lo que de suyo implica una erupción inminente.