Independientemente de quién gane la Presidencia el próximo 19 de junio, Colombia elegirá por segunda vez a una vicepresidenta, pero en esta ocasión será la primera de origen afro.

Tanto Francia Márquez como Marelen Castillo rompen con los estereotipos de vicepresidentes que ha tenido el país durante toda su historia. Más allá de ser mujeres, las dos representan sectores muy distintos de la sociedad, así como la lucha femenina por ocupar cargos que durante siglos fueron considerados propiedad exclusiva de los hombres.

¿Quién es Francia Márquez?

Francia Márquez, la fórmula a la Vicepresidencia de Gustavo Petro, nació en Suárez, un pequeño municipio del Cauca; proviene del seno de una familia de mineros y labriegos, desde los 13 años se interesó por la defensa del medioambiente, debido a que querían desviar un río que pasaba por su población. Ha luchado contra la minería ilegal como líder social, por lo que recibió amenazas. En 2018 obtuvo el premio Goldman, el más importante para los ambientalistas, lo que la llevó a ingresar al top 100 de las mujeres más influyentes del mundo, según la BBC.

Márquez, de 40 años, actualmente adelanta su especialización en escrituras creativas de la Universidad Icesi en Cali; fue presidenta del Comité Nacional de Paz, Reconciliación y Convivencia del Consejo Nacional de Paz. En ese espacio apoyó el impulso a la implementación de los acuerdos de paz, establecidos entre el Gobierno nacional y las Farc-EP.

Se define a sí misma como “parte de un proceso, de una historia de lucha y resistencia que empezó con mis ancestros traídos en condición de esclavitud. Soy parte de la lucha contra el racismo estructural, soy parte de los que luchan por seguir pariendo la libertad y justicia”.

Por la igualdad

Ya se ha dicho que Márquez, de ser elegida junto con Gustavo Petro como vicepresidenta de Colombia, sería la ministra de la Igualdad y contaría con cuatro objetivos principales: 1. Lograr igualdad salarial entre el hombre y la mujer. 2. Reconocer el tiempo de trabajo en el hogar como válido para la pensión. 3. Ingreso vital: medio salario mínimo, a la madre cabeza de familia. 4. Incorporar en la reforma agraria y en la economía popular a la mujer como titular de propiedad y como sujeto de crédito de fomento para emprender.

Márquez resalta que garantizar la economía para las mujeres significa garantizar autonomía y eso disminuye las violencias al interior del hogar. “Tenemos que hacer un gran programa de educación a los hombres para que reconozcan qué es el machismo, para que vean que hay que reeducarnos en la importancia de una sociedad que respete y valore a las mujeres”.

La candidata resaltó el rol de las mujeres en los hogares en beneficio de la sociedad colombiana, pero enfatizó que no se puede dejar de lado su importancia y necesidad en otros campos.

“Gracias al cuidado de la familia que hemos hecho las mujeres es que esta sociedad se mantiene; si fuera por el machismo y la historia política que tenemos, ya nos hubiéramos derrumbado. Es nuestro cuidado lo que ha permitido mantener esta sociedad, pero no podemos desconocer el papel de las mujeres en otros ámbitos”, indicó.

En cuanto al aborto, la caucana ha señalado que también es motivado por las condiciones económicas de la mujer. “A las mujeres las encarcelan, las judicializan y son mujeres empobrecidas porque las que tienen economías en este país se van al exterior a abortar”.

Agrega que “esto no es cuestión solo de valores y de ética y de moral. Es cuestión económica. Las mujeres más empobrecidas ¿usted cree que no tienen valores? Son las que terminan abortando y lo hacen porque no tienen cómo criar a un hijo solas porque están abandonadas”.

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¿Quién es Marelen Castillo?

La fórmula de Rodolfo Hernández nació en el barrio La Base, en Cali, donde se educó y se formó profesionalmente. Estudió biología, aunque su pasión ha sido la educación, a la que se ha dedicado como docente y como vicerrectora y rectora encargada.

Castillo, de 53 años, también se graduó de ingeniería industrial en la Universidad Autónoma de Occidente, magíster en Administración y Gestión de Empresas y doctora en Educación con énfasis en Liderazgo Organizacional de Nova Southeastern University.

Entre algunos de sus cargos destaca como rectora de la Uniminuto virtual y a distancia, y se desempeñó previamente como contratista del Ministerio de Educación. Por eso este tema es su eje central dentro de sus propuestas como fórmula vicepresidencial de Hernández.

Fue rectora encargada de la Fundación Universitaria Católica Lumen Gentium, luego de obtener su título de maestría en Administración en el Tecnológico de Monterrey y convertirse en doctora en Educación con un énfasis en Liderazgo Educacional.

Asegura que, aunque nunca había incursionado en el mundo de la política, se siente preparada para el cargo que aspira a desempeñar.

Por la educación

La vallecaucana dijo que su propuesta principal es la educación como un proceso transversal para la transformación del país. “Y es que pareciera que la responsabilidad solo recayera en el Ministerio de Educación, pero la corrupción también afecta y tenemos que partir de ahí, desde la base de la sociedad que es la familia, los que están en las regiones más apartadas; hay que trabajar para cambiar esa cultura y es muy triste que Colombia se haya vuelto a rajar en corrupción. Hay que educar a la gente si llega a los cargos públicos, a los contratistas, hay que educar a todo el pueblo colombiano”.

Algunos señalan que, por la experticia en la educación que tiene Marelen Castillo, podría ser la ministra del ramo en un gobierno de Rodolfo Hernández. Sin embargo, ella ha señalado que no será ministra.

“Mi decisión es hacer una Vicepresidencia excelente para Colombia y transparente porque hay mucho que hacer en la Vicepresidencia. A veces se limita a lo constitucional, pero si ampliamos lo constitucional hay una brecha social que hay que acompañar. Y ese es el trabajo que tenemos propuesto con el ingeniero Rodolfo Hernández, como su coequipera vamos a construir y vamos a trabajar por el cierre de esa brecha social”.

Marelen Castillo ha señalado que rescatar el campo “es una necesidad que tenemos, es una deuda por muchos problemas que hemos tenido en Colombia, por muchas circunstancias: la violencia, el narcotráfico, los cultivos ilícitos. No vamos a revaluarlos, pero sí hay que hacer una revisión y hay que apoyar al campesino colombiano”.

En cuanto al aborto, Marelen Castillo manifiesta “respeto a la vida, mi posición como mujer católica, pero también tengo mi posición de respeto a lo que las mujeres decidan. Ellas son responsables de esa decisión y entiendo a las mujeres”.

Se muestra respetuosa del fallo de la Corte Constitucional que despenalizó el aborto hasta la semana 24. “Los máximos órganos se manifestaron, legislaron y se respeta la institucionalidad”, dijo la aspirante.

Sin embargo, considera que se debería revisar el término de las 24 semanas que estableció la Corte para que no sea penalizado el aborto, pues cree que para ese periodo de gestación “ya tenemos un niño”.