Durante las últimas semanas, la expectativa sobre un incremento más acelerado de la inflación ha surgido como un tema que ha centrado la atención de los inversionistas, que ya presentaban cierta predisposición por el impacto económico de la pandemia de la covid-19.

De acuerdo a los datos del Bank of America sobre los fondos de inversión a nivel global, la inflación surgió como el riesgo que consideran los encuestados que va a impactar de forma más severa los mercados durante este mes.

En Colombia, esta opción está abierta a las inversiones. Allí están los Fondos de Inversión Colectiva (FICS), que se conocían, hasta hace poco como Carteras Colectivas. Actualmente, son una de las opciones más fáciles y más interesantes para que cualquier persona invierta. Primero, porque a muchos se puede ingresar con menos de $500.000; segundo, por su variedad. Hoy es posible invertir en acciones, inmuebles y hasta en compra de facturas o sentencias judiciales.

De acuerdo con el portal Mis Finanzas Personales, “los Fondos de Inversión Colectiva son productos financieros ofrecidos por fiduciarias, bancos y fondos de pensiones. En estos, cientos o miles de personas aportan dinero para invertir y obtener una ganancia. Como ponerse de acuerdo en qué invertir sería imposible, le encargan la administración de sus recursos a un experto. El experto, se encargará de gestionar la bolsa común de dinero y de invertirla de acuerdo a las reglas del Fondo”.

Los FICS pueden ser ofrecidos únicamente por entidades supervisadas por la Superintendencia Financiera, y se encuentran en fiduciarias, bancos y directamente con los fondos de pensiones.

Los fondos

Hoy también es posible invertir en Fondos de Inversión Colectiva a través de aplicaciones como Ualet, TPaga y Tyba. Hay dos formas de invertir en FICS: directamente en los Fondos de Inversión Colectiva que elija o a través de Fondos de Pensiones Voluntarias.

De otra parte, los expertos señalan que 2021 es un buen año para invertir en propiedades inmobiliarias. Y es que, en la reactivación económica, la construcción es el gran jalonador de la economía, como ya está demostrando en este primer semestre.

Si bien el panorama venidero seguirá marcado por los efectos contraccionistas de la covid-19, las proyecciones de gremios, Gobierno y analistas coinciden en que la actividad edificadora retomó el ritmo, particularmente a raíz del nuevo impulso que se le ha dado a la Vivienda de Interés Social (VIS), en aras de reactivar la economía.

Finca raíz

La Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), en sus proyecciones más recientes -divulgadas en enero pasado por Sandra Forero, presidenta del gremio- indica que se prevé la venta de 209.000 viviendas en Colombia para este año, lo cual representaría un crecimiento del 7,4 % respecto al 2020.

Del lado del mercado corporativo (bodegas, oficinas y locales), todo análisis de inversión deberá tener en cuenta las numerosas iniciativas comerciales e industriales que se avizoran en el horizonte por parte de privados, conforme las medidas de mitigación y prevención de contagios se flexibilizan y la vacunación en masa en Colombia toma forma.

El mercado fiduciario no es ajeno a esta realidad y, en este momento, cuenta con productos que le abren las puertas de este prometedor mercado inmobiliario 2021 a todos los perfiles de inversionistas.

Dicen que las inversiones no son para todo el mundo… pero el mercado inmobiliario es uno de los más abiertos, menos complejos y uno de los vehículos con mayor potencial de rentabilidad.

Además, el sector fiduciario dispone de una buena oferta de inmuebles en el mercado. Si todavía no está convencido de invertir en finca raíz.

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Renta fija

Por otra parte, está el mercado de renta fija local. De acuerdo con el Bancolombia, “para el mercado de deuda colombiano mantenemos una perspectiva negativa, sin que esto implique prescindir de este tipo de activos en los portafolios. Los recientes acontecimientos observados a nivel internacional, como el repunte de la inflación en Estados Unidos, y a nivel local, como el retiro de la reforma fiscal por parte del Gobierno colombiano, la rebaja de calificación por parte de S&P desde BBB- hasta BB+, y el estallido social asociado a la reforma tributaria han afectado los precios de títulos en el mercado de renta fija local”.

Consideran que más desvalorizaciones podrían presentarse si Fitch (agencia que tiene la nota de nuestro país en el último escalón del grado de inversión) rebaja la calificación a grado especulativo, debido a que esto incentivaría ventas de títulos locales por parte de inversionistas extranjeros, que en su mandato de inversión tienen como política exponerse a activos únicamente con grado de inversión. Adicionalmente a esto se suma un factor adicional a nivel local como posible fuente de volatilidad de corto plazo, y es el repunte que viene teniendo la inflación por cuenta de los bloqueos y que podría tener implicaciones sobre las expectativas en esta variable y en tasas de interés por parte del Banco de la República.

No obstante, estas desvalorizaciones podrían estar limitadas, pues Colombia a través de sus bonos en dólares     y primas de riesgo país negocia actualmente de forma similar a países con calificación BB+ e incluso BB-, como se puede apreciar en la gráfica.

Pese a que en el corto plazo el escenario luce retador debido a las desvalorizaciones en el mercado de deuda local, los analistas identifican algunas oportunidades de valor para el mediano plazo, especialmente en la deuda pública denominada en pesos.

Además, si bien podrían presentarse flujos de salida por parte de fondos de inversión cuyo mandato incluye el grado de inversión, también se presentarían entradas por parte de agentes que por mandato invierten en títulos de alto rendimiento.

Por otro lado, el mercado de acciones presenta amplios descuentos frente a sus pares de la región y las condiciones de liquidez a nivel mundial favorecen el ingreso de flujos hacia el mercado local.

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¿Qué hacer con la prima?

La pandemia ha impactado significativamente a la mayoría de los bolsillos y un ingreso adicional ayuda a afrontar la coyuntura actual. Por esta razón, muchos colombianos por estos días están planeando cómo invertir la prima de junio, sin embargo, no todos tienen claro en qué utilizarla.

De acuerdo con David Nieto, director del programa de Finanzas de la Universidad El Bosque, “uno de los errores más frecuentes de los colombianos es que se gastan la prima de servicios antes de recibirla y no realizan una buena planificación de este recurso. El no tener un presupuesto claro dificulta tener control sobre los bienes y servicios que adquirimos que no son tan necesarios en esta época. Por esta razón es importante incentivar la educación financiera desde una edad temprana, para tener un control de gastos y tener una mayor capacidad de ahorro”.

Por este motivo, hay algunos consejos, como hacer de manera realista un análisis para establecer un presupuesto de gastos e ingresos, con el que se puedan identificar las salidas de dinero que disminuyen la capacidad de ahorro cuando se reciben ingresos adicionales.

De allí que el experto dice que “si tiene deudas lo más importante es destinar el total o parte de este dinero para abonar o cubrir toda la deuda con el fin de generar un mejor flujo de caja en los próximos meses, mejorando la capacidad de ahorro”.

Considera que “pensar en el futuro es una buena opción, si le es posible guarde una parte de su prima en una cuenta de ahorros, CDT, fiducia, entre otros” finalizó.