El INPEC (Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario) intensificará las medidas de seguridad para Margareth Lizeth Chacón Zúñiga, tras el asesinato del testigo clave en el caso del fiscal paraguayo Marcelo Pecci. Este incremento en la seguridad responde a la reciente muerte de Francisco Luis Correa en la cárcel La Picota el 3 de enero de 2025.
Correa era considerado el cerebro del crimen contra Pecci y estaba colaborando con la Fiscalía para obtener una reducción de su condena a cambio de información sobre el asesinato. A pesar de haber sido advertidas sobre el peligro que corría, las autoridades lo trasladaron a una prisión común donde fue ultimado.
La ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, indicó que se están llevando a cabo investigaciones para esclarecer las circunstancias del crimen y se han comprometido a mejorar los protocolos de seguridad
Chacón, condenada por su participación en la planificación del asesinato de Pecci, es objeto de atención especial debido a la situación de riesgo que enfrenta. Las medidas urgentes incluyen la identificación y vigilancia constante de su persona por parte del personal penitenciario, así como un esquema de seguridad adaptado a su perfil durante cualquier traslado, ya sea para citas médicas o diligencias judiciales.
Se ha ordenado que Chacón sea acompañada y custodiada en todo momento por unidades del cuerpo de custodia y vigilancia, garantizando así su integridad física dentro del sistema penitenciario.
La prisionera, quien enfrenta una condena reducida a 35 años por homicidio agravado y otros delitos relacionados, ha mantenido su inocencia, alegando que es víctima de un complot orquestado por otros involucrados en el caso.