Por las fallas de seguridad evidenciadas en las instalaciones de la brigada 30 del Ejército en Cúcuta, donde se cometió en días pasados el atentado con carro bomba, el Ejército Nacional decidió relevar de sus puestos a dos coroneles.
Se trata del comandante de esa unidad, el coronel Ilver Orlando González, y el jefe del Estado Mayor, el coronel Pedro María Vega. Ambos han sido relevados de sus cargos de responsabilidad como parte de las investigaciones que se están llevando a cabo sobre lo ocurrido, cuenta Caracol Radio.
La pasada semana, una furgoneta ingresó en las instalaciones que la brigada 30 del Ejército de Colombia dispone en el Cantón Militar San Jorge, en Cúcuta, una ciudad situada en el noreste, explotando hasta en dos ocasiones, provocando daños materiales y al menos 55 heridos entre soldados y civiles.
Además de estas dos personas, otros seis militares están siendo investigados no solo por las negligencias en materia de seguridad que se habrían cometido, sino también por una posible participación en el atentado.
Las autoridades colombianas cuentan con el apoyo del FBI para intentar resolver lo que ya han calificado como un "atentado terrorista". La primera respuesta del Gobierno fue señalar al Elnestar detrás de la acción, algo que desde la guerrilla han negado.