Colombia recibió impacto en costo de alimentos de A. Latina | El Nuevo Siglo
DESDE LA pandemia, el valor de los alimentos afectó considerablemente a los consumidores. /Archivo
Foto: Archivo ENS
Lunes, 10 de Julio de 2023
Redacción Economía

Debido a la devaluación del peso, los sucesivos efectos del fenómeno de El Niño, la afectación de las cadenas de suministros internos por paros y bloqueos de vías, Colombia es el país que ha recibido el mayor impacto en el costo de alimentos de América Latina entre el 2015 y el 2022.

De acuerdo con una investigación del Bancolombia, en lo corrido del siglo XXI Colombia solo ha presentado dos episodios de inflación de alimentos elevada frente al promedio de América Latina: 2015-2016 y desde 2021 a la fecha.

Sostiene la investigación que en el reciente desacoplamiento de la inflación de alimentos se han repetido la devaluación del peso y la afectación de las cadenas logísticas internas.

“En lo que concierne a la inflación de alimentos, nuestra expectativa es que finalice el año en 6,5%, en un escenario sin afectaciones de orden público que perjudiquen las cadenas de suministro y una tasa representativa del mercado que fluctúe alrededor de los $4.300. Así pues, al incorporar la dilución de los efectos de segunda ronda del paro nacional de 2021, de la caída del Índice de Precios al Productor de alimentos que para junio exhibió una variación anual de 5,1 % –después de alcanzar su máximo de 52 % en febrero de 2022– y de la estabilidad de los precios del ACPM, prevemos que la tendencia bajista de la inflación anual de alimentos será la pauta para lo que resta del 2023”, sostienen los economistas.

De cara al futuro de corto plazo, entre tanto, la ocurrencia del fenómeno de El Niño es el principal riesgo alcista para la evolución de la inflación. Uno de los factores de mayor volatilidad es el de alimentos. Esto es resultado de que la estructura de oferta de estos productos está altamente expuesta a la dinámica de la tasa de cambio, la cadena de suministros y la cotización internacional de insumos y bienes, de las anomalías climáticas y de los costos para movilización interna por el país, principalmente, que muestran una alta variabilidad histórica.

Inflación

Señala el informe que, dentro de América Latina, Colombia fue la economía que registró la mayor inflación de alimentos. Según un estudio realizado por el Banco de la República, entre mayo de 2021 y julio de 2022 los precios de los alimentos en Colombia presentaron crecimientos anuales promedio del 17 %, 7 % superiores al resto de América Latina. Al respecto, la investigación encontró que los problemas de orden público en el país entre abril y junio de 2021 llevaron a que la inflación de alimentos se incrementara en 9 % más que en otros países, de forma estadísticamente significativa.



Indica el reporte que en 2015 Colombia vivió un paro camionero y de maestros que duró 38 días, entre marzo y mayo. Un año después, en 2016, los transportadores iniciaron un paro por 45 días al que se unieron los indígenas y agricultores, el que hasta ahora ha sido el de mayor duración por parte de los camioneros, a lo que se sumó la elevada depreciación cambiaria y el fenómeno de El Niño, elementos que llevaron a la inflación más elevada del siglo XXI en el país.

De acuerdo con los analistas, Colombia vivió una devaluación de su moneda local mucho más acentuada que la que evidenciaron sus pares, lo que resultó la receta perfecta para un avance atípico del precio de los alimentos. En particular, mientras nuestros pares exhibieron una devaluación cambiaria del orden del 37,9 % a mediados de octubre de 2015, Colombia lo hizo en 58,9 %.

Depreciación del peso

De hecho, esos mismos factores incidieron en la dinámica de los precios de los alimentos desde mediados de 2021, con la única excepción de la no ocurrencia de El Niño: una depreciación más elevada que la de nuestros pares en medio de problemas de orden público en el país.

En esta oportunidad, el paro nacional comenzó el 28 de abril y tuvo una duración superior a los 50 días. Además, este período estuvo relacionado con la pérdida de grado de inversión por parte de Fitch y S&P, que contribuyó a la posterior devaluación anual del peso colombiano, que alcanzó su punto más alto de 26,1 % anual en noviembre de 2022, mientras nuestros pares registraron una apreciación de su moneda local para aquella fecha de 4,5%.

En este sentido, si bien el fenómeno de El Niño representa un alto riesgo inflacionario para la canasta de alimentos, una afectación de las cadenas logísticas del país por cuenta de un paro y una elevada depreciación del peso colombiano son elementos también muy relevantes para los precios.