Gómez en Senado y Arias en Cámara, los nuevos presidentes | El Nuevo Siglo
Diana Rubiano/El Nuevo Siglo
Martes, 20 de Julio de 2021
Redacción Política

SE CAYÓ POSTULACIÓN DE BOLÍVAR A SEGUNDA VICEPRESIDENCIA

Sin mayores sorpresas transcurrió ayer la conformación de las nuevas mesas directivas para la última legislatura que fue instalada y se extenderá hasta el 20 de junio del 2022, pues se cumplieron los acuerdos que llevaron a ser elegido a la Presidencia del Senado de la República al conservador Juan Diego Gómez; en tanto que en la Cámara de Representantes quedó Jennifer Arias, del Centro Democrático.

Mientras que a la Primera Vicepresidencia del Senado fue elegida la senadora llanera Maritza Martínez, del Partido de La U.

La única crispación se dio por la postulación que hizo la oposición a la Segunda Vicepresidencia del Senado, posición que por ley le corresponde, de Gustavo Bolívar (Lista de la Decencia), la cual no tuvo eco en la plenaria de la corporación pues se presentaron 66 votos en blanco y 32 votos a favor.  

Este resultado causó sorpresa en las toldas de la oposición que había apoyado el acuerdo de los partidos mayoritarios con la postulación que hizo el Partido Conservador de Juan Diego Gómez, a la presidencia, y la U con la senadora Maritza Martínez, a la Primera Vicepresidencia.

No obstante, la oposición insistió en la postulación de Bolívar a la Segunda Vicepresidencia del Senado.

Empero algunos recordaron que la ley establece que cuando gana el voto en blanco se debe repetir la elección con diferentes candidatos, por lo que Bolívar habría quedado inhabilitado.  

Fue entonces cuando la senadora Sandra Ortiz, de la Alianza Verde, propuso a su colega de colectividad Iván Name para ocupar la Segunda Vicepresidencia del Senado, a lo que se opusieron las otras bancadas de oposición que en consecuencia se retiraron del recinto sin que se afectara el quórum.

Finalmente se hizo una nueva votación siendo elegido el senador Name a la segunda vicepresidencia de esta corporación.

Este episodio dejó dos consecuencias: la primera que una parte de la oposición liderada por el sector de Gustavo Petro y el Polo, considera que le conculcaron el derecho de ocupar ese cargo.

En segundo lugar se habría producido una fractura en el seno de la oposición, pues las bancadas que insistían en postular a Bolívar al cargo, no vieron con buenos ojos la actitud de la Alianza Verde que en medio de la discusión propusiera a Name.

El senador Bolívar reaccionó señalando que “el Partido Verde, violando el Estatuto de la Oposición, porque ya ocuparon la Segunda Vicepresidencia, y haciéndole el juego al uribismo, postula a Iván Name, a quien la derecha sí acepta. Es una traición a las minorías. Aceptable en el Centro Democrático pero jamás en el Partido Verde. Traición”.

Por su parte el senador polista Alexander López dijo que “esto es grave lo que están haciendo las mayorías, por más de que no quieran a Gustavo Bolívar por lo que ha denunciado en materia de corrupción, no es causal para vetarlo y vetarnos a nosotros”.

Mientras que el senador Petro (Colombia Humana-UP) dijo que “las mayorías del Congreso impiden que la minoría, la oposición, tenga presencia en la mesa directiva. Eso lo prohíbe la ley y la Constitución. La bancada debe retirarse y queda subjudice la elección de mesa directiva del Senado”.



No fue un buen día para la oposición la instalación del Congreso, pues a lo sucedido con Bolívar se suma el hecho de que el presidente Duque, tras intervenir ante el pleno se retiró, lo cual fue de mal recibo entre los parlamentarios contradictores de su Gobierno, pues el Estatuto de la Oposición les da el derecho de réplica al discurso que dé el Jefe de Estado, y por ello esperaban que los escuchara.

Sin embargo Duque a través de un decreto delegó al ministro del Interior, Daniel Palacios, para que se quedara en el Capitolio a escuchar la réplica de la oposición.

En cuanto a la presidencia del Senado, Juan Diego Gómez Jiménez fue elegido con 93 de 101 votos, atendiendo, como se dijo, los acuerdos de los partidos mayoritarios que se vienen cumpliendo a rajatabla desde el 2018.

“En la historia reciente del país no habíamos iniciado una legislatura en medio de tensiones sociales, políticas, sanitarias y económicas que causan desconcierto y desconfianza hacia las diferentes instituciones del Estado; pero es precisamente cuando se presentan estas dificultades que necesitamos fortalecernos, hacernos visibles, propositivos y presentar soluciones que nos lleven por el camino de la recuperación”, afirmó el senador Gómez.

Sostuvo que en mayor medida en este momento el papel del Congreso es ser un facilitador de toda iniciativa en pro de la reactivación económica, de tal modo que prometió trabajar en el fortalecimiento de más bases para Colombia como un país de emprendedores, con una normatividad sólida y confiable.

Junto con el respeto y la legitimidad, el nuevo titular del Senado enfatizó en “el diálogo social que demandan las diferentes expresiones de los ciudadanos en la calle para construir una agenda de concertación donde reconozcamos las diferencias regionales, económicas y políticas que nos permitan tomar el rumbo de la reconciliación a partir del debate democrático”.

De igual forma se comprometió a impulsar el proyecto de ley estatutaria para reglamentar la protesta social y garantizar la reforma de la Policía.



En Cámara

La Cámara eligió a la representante del Meta por el Centro Democrático, Jennifer Arias, como su presidenta para la última legislatura, después de 17 años que una mujer no ocupaba esta dignidad. Obtuvo el apoyo de 130 de los 153 congresistas que votaron.

En su discurso de posesión se comprometió a mejorar la percepción que tiene la ciudadanía acerca de la Corporación y a exaltar el papel preponderante de las regiones para la reactivación económica.

“Tenemos el enorme reto de recuperar la imagen de un Congreso con altos niveles de desaprobación, y estoy convencida que en esta legislatura trabajando en equipo, con presencia aún más fuerte en nuestras regiones y construyendo sobre las diferencias, Colombia brillará desde los territorios”, expresó Arias.

En tanto que a la Primera Vicepresidencia de la Cámara fue elegido el representante liberal por Putumayo, Carlos Ardila, y en la segunda vicepresidencia Luis Alberto Albán, del Partido Comunes.



Réplica de la oposición

Conforme a lo establecido en el Estatuto de la Oposición, tras la intervención del presidente Duque la oposición política ejerció el derecho de réplica al discurso dado por el Jefe del Estado, que estuvo a cargo de los senadores Pablo Catatumbo, del Partido Comunes, y Antonio Sanguino, del Partido Alianza Verde; y la representante a la Cámara por Bogotá, María José Pizarro, de la Lista Decente. 

Sin embargo, el presidente Duque tras su intervención abandonó las instalaciones del Capitolio y no se estuvo para escuchar la réplica de la oposición, como también lo hizo en 2019 cuando instaló la segunda legislatura.

Frente a lo ocurrido la representante Pizarro dijo que "escuchamos a Duque y pensamos que vive en un país que no es Colombia. Se va justo cuando va a hablar la oposición. Entonces tomamos la decisión de no hablarle a un presidente que delega sus orejas, sino a Colombia”. 

Por su parte el senador Pablo Catatumbo dijo que "el Acuerdo de Paz podría resolver el descontento en Colombia", y reiteró su compromiso con la paz y las víctimas. 

El senador Sanguino, por su parte, dijo que "la magnitud de la crisis de derechos humanos es inocultable" y que el "Gobierno del presidente Duque en lugar de reconocer sus errores, garantizar la protección de los derechos humanos y acoger las recomendaciones, acudió al irrespeto del principio de buena fe y de las obligaciones internacionales de Colombia".

Agregó el Parlamentario que “este Congreso de la República instala su última legislatura en medio de enormes desafíos derivados del reciente estallido social. El Presidente de la República, sus funcionarios y sus bancadas aliadas, pretenden esquivarlo con reformas cosméticas que no atienden de fondo al grito de indignación y angustia de las ciudadanías".