Después de 10 meses, la inflación estaría por debajo del 12% anual | El Nuevo Siglo
COMENZARON a ceder los precios de los alimentos para mejorar la tendencia positiva de la inflación.
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Lunes, 7 de Agosto de 2023
Redacción Economía

CONTINUANDO con el descenso de los últimos tres meses, hoy el resultado de la inflación estaría por debajo del 12% anual, por primera vez desde septiembre del año pasado y rompiendo así el quiebre del Índice de Precios al Consumidor (IPC) al alza.

De acuerdo con los investigadores del Bancolombia, “estimamos que el IPC, que el DANE dará a conocer hoy, tuvo una variación mensual de 0,37% en julio. Esta expectativa se encuentra por encima de la previsión de los analistas, según las encuestas realizadas por el Banco de la República (0,30%), Citibank (0,30%), Bloomberg (0,18%) y Fedesarrollo (0,36%). Esta diferencia se explica en que nuestra estimación es más alta en el rubro de alimentos”.

Sostienen los analistas que “de materializarse nuestra expectativa, la inflación anual del país retrocedería por cuarta vez consecutiva, ya que pasaría de 12,13% en junio a 11,65% en julio. A diferencia del resultado anterior, en julio ya se habría empezado a evidenciar el inicio del periodo de desinflación de la mayoría de los componentes del IPC y no solo el de alimentos, para ubicarse en línea con nuestra reciente actualización de proyecciones económicas, lo que nos lleva a reafirmar nuestra expectativa de que la inflación finalizaría 2023 en 9%. Ante este escenario, anticipamos una nueva y última decisión de estabilidad en tasas por parte del Emisor en la reunión de política monetaria de septiembre”.

Previsiones

Indican los expertos que “a diferencia del consenso de las encuestas del BanRep y Citibank, que estiman una variación mensual del IPC de alimentos en julio de -0,25% y -0,10% respectivamente, la más reciente publicación de nuestro monitor de precios de bienes básicos anticipa que la inflación de este rubro se habría ubicado por encima de dichas cifras. Esto habría sido resultado de un cambio de tendencia tanto en los procesados como en los perecederos, siendo estos últimos los de mayor avance mensual. En los procesados, esperamos un fuerte cambio de tendencia en el precio del arroz, la carne de cerdo, las carnes preparadas, los quesos y la fruta congelada. Por su parte, destacamos los elevados incrementos del precio de la fruta fresca, la cebolla, la zanahoria, la arracacha y el tomate”.

Añaden los analistas que “a su vez, se pudo evidenciar que las ciudades con mayor incremento en el precio de los alimentos habrían sido Pereira, Armenia y Villavicencio. En contravía, en Valledupar, Bogotá y Neiva esperamos se haya observado una caída”.

Ante esto, los precios de los alimentos habrían presentado una variación mensual de 0,14%. De confirmarse, la inflación anual de alimentos alcanzaría un nivel de 13,15%, mínimo desde septiembre de 2021.

“En este sentido, a pesar del cambio de tendencia que esperamos, los efectos de alta base de comparación permitirían que, a pesar de ligeros avances mensuales del IPC de alimentos, la tendencia bajista de la inflación anual de este componente continúe”, manifiestan.

Sin alimentos

Ahora bien, en relación a la inflación sin alimentos, se espera que los avances en la canasta de regulados y de servicios marquen la pauta. En el rubro de regulados, el incremento mensual del precio del galón de gasolina corriente (+$ 600) y el componente indexado de las tarifas de electricidad, gas y acueducto explicarían el mayor aporte de la canasta, sumado al incremento en los precios de los peajes que ya se empezaron a materializar en junio.

En relación a los servicios, esperamos nuevos aumentos mensuales por encima de su media histórica en las tarifas de arriendo, así como incrementos en el precio de los servicios de transporte, en especial el urbano.

En la categoría de bienes, se habría prolongado la tendencia de desaceleración, en especial en los vehículos y las prendas de vestir. Esto sería posible por una moderación del impacto de la indexación, la evolución de la TRM en lo corrido del año y un bajo consumo de los hogares, elementos que han motivado descuentos.

En ese mismo sentido, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se refirió a la inflación y a las tasas de interés del Banco de la República y dio luces de que estas podrían tener reducciones en los próximos meses.

Expectativas

Sobre la primera, afirmó que es muy posible que vuelva a ceder por cuarto mes consecutivo.

“La expectativa es que lo coloquemos por debajo del 12%, que siga la tendencia descendente, hasta ahora todos los elementos previos señalan que va por ahí”, afirmó Bonilla en el Congreso de la Asociación Colombiana de Instituciones Microfinancieras (Asomicrofinanzas).

Señaló, según Valora Analitik, que este comportamiento tuvo que ver con la bajada del Índice de Precios al Consumidor en los alimentos, fertilizantes, entre otros.

El funcionario anotó que esos elementos previos significan que el Índice de Precios al Productor (IPP) viene bajando y que los datos sobre alimentos en Corabastos, en el Sistema de Información de Precios (Sipsa), en otras fuentes de información, revelan que los alimentos están bajando, los fertilizantes y fungicidas bajaron y, por lo tanto, que todo apunta a que siga la tendencia descendente, aunque queda pendiente el precio de los combustibles, que tienen aumentos mes a mes para contrarrestar el déficit de cerca de $ 30 billones en el Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (FEPC).

Tasas de interés

Sobre las tasas de interés del Emisor (13,25%), Bonilla afirmó que se estudiará la idea de bajarlas en la medida en que la inflación siga con tendencia a la baja. Por esto, no descartó que empiecen a tener recortes entre septiembre y octubre.

“Se vuelve a tocar en septiembre y octubre, en ese momento habría cinco meses de seguimiento de inflación. Si esta continúa en la senda que estamos esperando y va hacia el cierre del año en un dígito (…), significa que se puede mirar cómo descienden las tasas”, Bonilla, de acuerdo con el citado medio.

El ministro Bonilla dejó claro que estas podrían cerrar el año en 11%, debido a que no se pueden hacer reducciones muy abruptas.

Por otra parte, el Banco de la República dio a conocer el Informe de Política Monetaria de julio de 2023 e hizo un análisis de lo que pasó con la inflación y la tasa de interés.

Destacó que, como se esperaba en el informe de abril, la inflación empezó a caer en el segundo trimestre de 2023. Por lo tanto, se proyecta que siga la caída en los siguientes trimestres y esté cerca de la meta del 3% a finales de 2024.

De acuerdo con el Banco de la República, el principal factor detrás del descenso de la inflación es que hay menores incrementos en los precios de los alimentos por la buena oferta agrícola local y reducciones de los precios internacionales de los alimentos importados.

También está una caída de la tasa de cambio y de los costos de transporte que reduce las presiones al alza de los precios de los bienes, principalmente de los importados.

“Efectos acumulados de los aumentos de la tasa de interés de política monetaria, a través de su impacto en la moderación del crédito y del gasto de firmas y hogares. En contraste, el comportamiento de los precios de algunos servicios y los incrementos requeridos en el precio de la gasolina no han permitido que la inflación se reduzca más”, son otros factores mencionados.

Rumbo de intereses

Sobre la tasa de interés, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla precisó que el nivel actual de la tasa de interés de política monetaria (13,25%) es necesario para seguir con la consolidación del descenso de la inflación hacia la meta del 3% y así contribuir a que la economía colombiana crezca de manera sostenible.

Es de anotar que, en las reuniones de junio y julio de 2023, la Junta Directiva del Emisor decidió por unanimidad mantener su tasa de interés inalterada en 13,25%, consistente con el objetivo de llevar la inflación a la meta de 3% a finales de 2024.

La postura se debe a que la inflación aún es elevada, los pronósticos y expectativas de inflación son superiores a la meta del 3%, y persisten excesos de gasto que presionan al alza algunos precios en el país.